"La gratitud, como ciertas flores,
no se da en la altura y mejor reverdece
en la tierra buena de los humildes"
José Martí
La estupidez de un sector de la oposición, se parece a esos remolinos en plenas sabanas de los llanos en época de verano, adquieren una fuerza destructible, y el que, no se aparte se lo lleva, y pobre del que se deje arrastrar, porque termina tan maltrecho, desvariando que, toda persona en sus plenos cabales y con un mínimo de amor por la patria, al ver las reacciones, o metidas de "pata" de estos desorbitados y enfurecidos seres, antes la bien ganada medalla de plata del compatriota Julio Mayora, en Tokio 2020 -2021- lo menos que, puede sentir es repulsión y lastima por el odio y la mezquindad despedida por estos connacionales, como si estuvieran actuando para complacer a los que, siente placer por la muerte, como los cinéfilos a las películas de terror.
Apenas se supo de la medalla de plata, del joven guaireño, Julio Mayora –precisamente el día del cumpleaños 67 del comandante Chávez– empezaron los mismos de siempre a través de las redes sociales a vomitar, con síntomas graves de la enfermedad del cual vienen padeciendo en los últimos años, y muchos de ellos, atacaron al atleta, en una actitud por demás miserable, porque rememoró la presencia de Hugo Chávez en un acto, cuando apenas tenía 12 años, el cual le sirvió de inspiración para llegar a Tokio, con el corazón de patriota, para levantar nuestra bandera, con el orgullo de sentirse hijo de la patria de Simón Bolívar.
Por poco los 346 kilos (156-190) levantados con el coraje y el patriotismo de Julio Mayora, no termina de aplastar precisamente a todos esos opositores que, siempre están apareciendo con el cuchillo en la mano, buscando herir los sentimientos de los verdaderos venezolanos inspirados en las enseñanzas del Libertador Simón Bolívar, y de su sobresaliente alumno Hugo Chávez; pero, como el mal es incurable, apenas el joven practicante de la halterofilia, le dedicó su presea de plata al comandante por su cumpleaños, estallaron en un llanto incontrolable, y ahora el problema es saber, a quién se le revolvió más la bilis, para que lo tome en cuenta Joe Biden, cuando pase revista nuevamente en el grupo de opositores seguidores de Guaidó.
Desde el mismo momento de tomar el poder el comandante Chávez, se trazó un objetivo: levantar el espíritu de combatividad de nuestros atletas; y eso en parte se ha visto recompensado por esta dedicatoria de Julio Mayora, por que los recuerdos de niños se llevan sembrados en el corazón, como se siembra un amor y perdura a través del tiempo, hasta echar raíces. El amor por la patria se lleva en las cosas cotidianas de la vida, y por eso repito una expresión, el cual le alborota la poca tranquila a estos señores, hasta reaccionar, como unos verdaderos energúmenos ¡U-á…U-á CHÁVEZ NO SE VA!