“Castigad al malhechor y poco te importe que él también tenga derecho a la defensa”
Mientras la oposición venezolana, la cúpula, pasa el día domingo en clubes, playas privadas, paseo en yates, bingos, casinos, encerronas en quintas, bungalow, Pent house o mansiones, planificando atentados contra la democracia y Chávez, en unión de LOS MINISTROS DE DIOS, éste, Chávez se cala todo un día trabajando en ALÓ PRESIDENTE, para decirle a su pueblo que es lo que se está haciendo y lo que se va hacer.
Mientras Julio Carlos Andrés Borges se “colea” en la AN, demostrando poca dignidad, pues hace tiempo que se negó a ser parte de ella, a emitir incongruencias, obviando que fue parte de quienes atentaron contra el estado de derecho en 2002, planificando juntos a los golpistas la marcha a Miraflores, la caía de Chávez, los disparos desde el Ausonia y El Edén, las muertes de venezolanos, el paro petrolero que dejó sin comida al pueblo y que hizo quebrar a muchos pequeños industriales y comerciantes, la adhesión al gobierno dictatorial de Carmona de sus militantes, Chávez trabaja a full chola para que tres millones de venezolanos tengan gas en sus hogares.
Mientras Enrique Capriles Radonsky, el mismo de la invasión a la embajada cubana, el mismo que arengó a la turba plástica a destrozar vehículos y pertenencias de esa nación, que alentó al hijo de Pilarica Romero a que amenazara con dejar sin agua, ni comida, ni corriente, menos teléfono a niños, mujeres y hombres de esa embajada , paga una página completa en la PRENSA con el dinero de los contribuyentes, tratando de penetrar el cerebro de hormigón del pueblo con una propaganda que se cae por ramplona e incoherente, la Revolución trabaja en pro de los de menos recursos al inaugurar mercales para la comida de la mayoría a menos precios.
Mientras Chávez envía un helicóptero a un pequeño país amenazado por las llamas que queman su geografía, para combatir el dolor, Leopoldo López, Guarimba, planifica con sus gañanes la forma de perturbar la tranquilidad de la nación venezolana, reuniéndose en mansiones y quintas, iglesias y cuchitriles, buscando la desestabilización macabra de siempre, e ignorando que vive un mundo equivocado, porque el pueblo que está con la Revolución, todavía “no ha peleado” como suele hacerlo cuando se arrecha. Quiere muerte el patán efebo de la oligarquía ladrona y mezquina.
Mientras la Revolución se pierde vista, volando al lado del Poder Popular, de las juntas comunales, de las misiones, de las clínicas, de los hospitales, de todo lo que signifique equidad entre las riquezas del estado y el pueblo, la oligarquía cruel e inhumana sigue su línea cipaya escuchando al amo de turno y sus predicciones de tormenta. Mientras Estados Unidos habla de un anti semitismo en Venezuela, los comerciantes judíos escriben doble páginas en los baucher bancario para que quepan con más facilidad los guarismos, porque en Venezuela hay más dinero, más capacidad para ahorro y gastos, para adquirir lo que el pueblo anhela.
Mientras Chávez trabaja, y trabaja con sus ministros, su gente fiel, sus patriotas, Ismael García y Ramón Martínez, después de haber logrado lo que poseen gracias a la REVOLUCIÓN, se colocan en la escalera de enfrente en contra de un pueblo que confió en ellos durante varios años, jalándole bola a la oligarquía, poniéndose a los pies de quienes fueron sus “contrarios” en tantas cabalgatas. Se despojaron de las máscaras: son unos cobardes olorosos a pachulí, son hombrecitos de Liliput, deslastrados del amor de un soberano, que desde ya los envió al ostracismo, por atentar contra fuenteovejuna.
Mientras Chávez crece como la sombra cuando declina la tarde, la oposición sin ideas, sin otra cosa que no sea la envidia, la traición, la hipocresía, la bajeza, se va por un despeñadero cada día más profundo, de donde no emergerá jamás a la superficie de los sueños. Mientras el pueblo los ignora, ellos se imaginan muchas cosas. Mientras el pueblo permanece en la quietud de la paz, ellos planifican maldades. Mientras el pueblo agarra con más firmeza las armas de la lucha, ellos se ciegan y caen en un estado de degradación terrible, pues no entienden que BOLÍVAR DESPERTÓ DE SU SUEÑO DESPUÉS DEL 27 de febrero de 1989 y presto está a llevar a sus hijos a la liberación total: a la victoria final, que es LA MAYOR SUMA DE FELICIDAD POSIBLE dentro de una sociedad socialista, sin mejores ni peores, sin esclavos ni esclavizadores.
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