Transformar el aluminio de Guayana en viviendas

En Venezuela existen necesidades de nuestro pueblo que podemos dar respuestas efectivas con potencialidades que poseemos; es el caso de la problemática de la vivienda según datos no oficiales el déficit habitacional alcanza 2.000.000 millones de unidades con un crecimiento del 7% a 8% anual y en el Estado Bolívar existe un déficit habitacional entre 140.000 y 150.000 unidades. Otro dato importante es la existencia de cerca de 1.500.000 millones de viviendas para su rehabilitación integral en el país.

El Ministro de la vivienda, Farruco Sesto, informa que el Gobierno Nacional estima construir 180.000 unidades en el 2009 y otros conocedores de la materia estiman que se pudiera construir de 200.000 a 250.000 con una mayor coordinación; esto nos muestra la magnitud del problema y la posibilidad de engranar esfuerzos para aportar proyectos viables donde se unifique el esfuerzo de las empresas estratégicas como PDVSA, SIDOR, VENALUM, ALCASA y otras. Eso si, con el protagonismo del pueblo el mas grande constructor de viviendas y hábitat que en oportunidades solo necesita de la orientación de profesionales para cumplir con la normativa legal vigente.

En Guayana contamos con VENALUM con una producción de 430.000 TM / A y ALCASA con una producción de 210.000 TM/A, con una infraestructura subutilizada que pudiera ser orientada en función de dar respuesta al déficit habitacional en Venezuela. La Gerencia de Laminación de ALCASA, esta en condiciones de procesar láminas de aluminio para perfiles y techo para viviendas. Existe una experiencia que consiste en un proceso que empieza en la Gerencia de Fundición con la elaboración del planchón que tiene un peso de aproximadamente 6 toneladas métricas y que al entrar en el proceso de laminación se generan bobinas de aluminio que a su vez son utilizadas para la fabricación de laminas de aluminio, según previa especificación, las cuales son aptas para la instalación de techos para viviendas y que por los momentos es solamente comercializada a los trabajadores de la factoría.

Existe igualmente la experiencia de acuerdos de ALCASA con empresas foráneas a quien la empresa suministra el aluminio y recibe láminas acanaladas para sustituir los techos deteriorados de las instalaciones de la factoría. Esta misma metodología puede utilizarse para incorporar empresas transformadoras nacionales y EPS en la iniciativa de procesar el aluminio.

La iniciativa se enmarca en las Lineas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013, según el Modelo Productivo Socialista “La producción en la búsqueda de lograr trabajo, de su estructura jerárquica actual y a la eliminación de la disyuntiva entre satisfacción necesidad y producción de riqueza.

El modelo productivo responderá primordialmente a las necesidades humanas y estará menos subordinadas a la reproducción del capital.



La creación de riqueza se destinara a satisfacer las necesidades básicas de toda la población de manera sustentable y en consonancia con las propias exigencias de la naturaleza en cada lugar.

El Estado conservara el control total de las actividades productivas que sean de valor estratégico para el desarrollo del país y el desarrollo multilateral y de las necesidades y capacidades productivas del individuo social”.

Es dar un uso estratégico a los recursos naturales y la materia prima con el mayor grado de elaboración posible para satisfacer las necesidades básicas de las comunidades

Hablar de techos livianos para viviendas es hablar de un componente que se ha utilizado en forma tradicional desde la época pre-colombina hasta nuestro tiempo; tradición que por demás está muy bien justificada por las características que ofrece nuestro clima, materiales y tecnologías introducidas en el mercado, su sencilla instalación, el peso, que lógicamente dependiendo del diseño del techo no sobrepasa de los 100 Kg./m2 (peso propio), al punto que para el montaje de algunos de ellos, no se requiere del asesoramiento técnico. Otro aspecto que caracteriza al techo liviano es el costo, pues se trata de techos que por no requerir en su mayoría de mano de obra especializada o de montajes con equipos costosos, aminora el precio económico con respecto a otro tipo de techo que demanda mayor uso de recursos.

Ferre SIDOR, es una iniciativa acertada, pues logra romper con la cadena de intermediarios y expende materiales de construcción tales como bloques, cabillas, palas, picos, alambres, clavos, tornillos y a esa red de distribución debemos añadir otros artículos que incluya el aluminio de diferentes formas como laminas para techos y de perfiles para la construcción de viviendas. El Presidente Comandante Hugo Chávez, acoto la idea de comenzar a adelantar un conjunto de proyectos para buscar minimizar el déficit de viviendas, y a expresado: “bajando los costos, hay que darle prioridad al suministro de cemento, bloques y cabillas a los barrios más pobres”. Agosto 2008.- Programa Dando y Dando.

Con esta orientación debemos entonces tomar la iniciativa para crear las condiciones en las empresas estratégicas del Estado Venezolano para dotar a nuestro pueblo de herramientas necesarias para activar por la base de la autoconstrucción, la solución de un problema que afecta de manera directa a la familia y que permite por un lado garantizar la mayor suma de felicidad a los ciudadanos y por el otro activar el aparato productivo del país que por medio de la autoconstrucción permite la adquisición de diversos insumos durante la construcción y luego de culminar en dotarla de los elementos básicos para la convivencia.


mfiguera77@yahoo.com
trabajador de alcasa


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Manuel Figuera (*)


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