Conocidos los datos, que suelen presentarse con bombos y platillos sobre los millones de bolívares que estas visitas de turistas “nos dejan” y que son usadas como un dato que refleja además una excelente gestión, que seguramente lo es; uno se siente obligados a formularse algunas preguntas: ¿Cómo este esfuerzo que realiza el gobierno estadal a través de promociones y publicidad se corresponde con un plan turístico que disponga de una orientación cercana a un lineamiento de tipo socialista? ¿Hay el Plan turístico? ¿Cuáles son los elementos sustantivos de ese plan? ¿Qué aspecto trata de redimensionar este plan? ¿Qué objetivos contiene? ¿Qué existe detrás de esa idea de celebrar las visitas por la cantidad de dinero que “nos generan”? ¿El dato relevante del Plan es únicamente la cantidad de dinero “que nos dejan”? ¿A quién realmente se los deja?
Antes de embarcarme en esta iniciativa de emprender un análisis y tratar de responderme estas preguntas, me cuidé de realizar la respectiva investigación y verificación de la información que sobre este tema existe y aunque la encontrada no está plenamente confirmada, puedo decir que el ejecutivo estadal dispone de una Dirección que lleva algunas cosas de promoción turística pero carece de un plan turístico. Conocí que formulan lo que por allá se denomina Plan Anual, que según me informaron, es una especie de propuesta que establecen las acciones a ejecutar en el lapso de un año.
Decidí ahondar sobre esto con el objeto de conocer el horizonte y orientación del Plan Anual y se me complicó la búsqueda porque la información no está disponible fácilmente. Me fui a la Corporación de Turismo del Estado Anzoátegui –CORANZTUR- y no tuve respuesta y debí acudir entonces a un camarada que es colaborador del equipo del PSUV del Municipio Bolívar y labora en el Consejo Legislativo –CLE- y me facilitó una copia de lo que comprende el sector 6 en la ley de Presupuesto de Ingresos, gastos y Operaciones de Financiamiento y en esa copia pude observar un ligero desorden en cuanto a lo que se consideran elementos o aspectos básico de la planificación de ese ente. Pero esto no interesa ahora; la idea o el objetivo fue darles respuesta a las interrogantes que formulé al inicio de este artículo.
Un Plan turístico que vaya más allá del año no existe según la información disponible en el ente. En la ley de presupuesto se lee este objetivo: “Coadyuvar en la procuración de la infraestructura y servicios básicos para el desarrollo turístico del Estado”. Al buscarle consistencia a este objetivo con los indicadores de desempeño que contiene la Ley de Presupuesto para esta Dirección, se observa más claramente el ligero desorden y la falta de consistencia. Los indicadores de desempeño señalan: 1) Número de visitantes al estado Anzoátegui y 2) Número de nuevos empleos directos e indirectos generados por la actividad turística.
Son dos cosas muy distintas; un sentido tiene el objetivo y otra los indicadores. Pero es evidente que el objetivo cuadra con la idea de fijarse únicamente en el dinero que los visitantes supuestamente “nos dejan”, pero no hay interés en asegurarse que lo que “ nos dejan” los visitantes se corresponda con el aparente perfil socialista que debería tener –por ahora- CORANZTUR. No es difícil suponerse que lo dejado por los visitantes se concentra en las grandes cadenas de hoteles y grandes centros comerciales. Esto no es malo, pero deberíamos tener un Plan de desarrollo turístico en el cual todo ese esfuerzo de promoción –Venta de atractivos turísticos- que se realiza el Ejecutivo no se quede en estas grandes corporaciones de hoteles. Un plan de desarrollo turístico desde la instalación de un gobierno revolucionario ha debido plantear un ligero cambio de esta realidad y en esa propuesta caben algunas iniciativas: a) Desarrollo de las alternativas de posadas con propuestas de financiamiento, b) Organización real y efectiva de comunidades con potencial turístico.
Me informan de un boulevard en la vía hacia el estado Sucre, un proyecto de boulevard en Lechería y un proyecto que anda todo extraviado por los Boquetitos en Puerto la Cruz. Observo que son iniciativas que les faltan corazón y alma. Mientras tanto, la cantidad de millones que supuestamente "nos dejan" los visitantes me “huele” a esa idea de creer que un montón de millones es sinónimo de desarrollo y que ese montón de millones es suficiente y es una meta que debe producirnos mucha satisfacción y bienestar.
En el mejor de los casos, Coranztur si plan ni nada, se comporta como una mala agencia de festejo. Hace una inversión en promoción y publicidad para que unos actores socialmente muy definido hagan su negocio. Es tiempo de revisar esta política.