Es realmente asombroso que los medios ni las autoridades locales hayan abordado de una vez por todas el problema del transporte público en Vargas. Cada año y para esta fecha las apetencias crematísticas de los conductores de las líneas que cubren la ruta Caracas-Litoral adquieren dimensiones insaciables, fíjense que muchos de ellos ya han colocado en sus unidades una tarifa como parte de la estrategia de ablandamiento de conciencia de los usuarios y usuarias… Esperan cobrar el pasaje a 3 bolívares, cuando el precio actual es de 2,60.
El caso es que este año y en el contexto de las próximas elecciones, los conductores han endurecido su táctica de presión y nadie ha salido en auxilio de los que día a día son víctimas de la burla, el maltrato y la desconsideración; son horas y horas que puede usted esperar en la parada de Capitolio y no verá más que piratas cobrando hasta 10 bolívares ¡y más! En tempranas horas de la tarde. Hemos visto vehículos de la línea pirateando o cobrando precios por encima de la tarifa estipulada. Ante este chantaje de la línea Caracas – Catia La Mar la alcaldía calla cómplice o probablemente “paralizada” ante la amenaza de que se profundice el conflicto.
Pero veamos qué es lo que ocurre: desde hace un año los conductores pretenden establecer la tarifa de 3 bolívares y esta vez, en plena coyuntura electoral, han puesto un chuzo en la garganta de las autoridades. El problema es que ya hay precedentes en los que se ha impuesto el poderío de los transportistas y ahora las autoridades vacilan entre trasladar el dolor a los pasajeros que son miles y dejar a los conductores -que son cientos- imponer su codicia e indolencia. La estrategia más que una reivindicación económica de los conductores parece un recurso para restarle votos al gobierno. El Pugilato entre conductores y pasajeros se ha prolongado por más de 3 meses, en la parada de Capitolio somos testigos de la quema de basura que cada noche perturba el centro de la ciudad. La guarimba es vespertina, en las mañanas el transporte funciona con regularidad, en las noches comienza la emboscada y la escena se repite a diario llenando de rabia e impotencia a los usuarios. ¿Por quién van a votar?
Cada noche 3 fiscales de tránsito intentan poner orden en el caos y a la vez llegan a “acuerdos heterodoxos” con los choferes. A pocos metros de la parada de Capitolio hay un módulo policial, pero los funcionarios intervienen casi siempre en contra de las usuarias y usuarios. Poco importa que muchas mujeres con niños en los brazos esperen por horas y eso no debería tener que ver con el clima electoral – son madres y jamás nadie, sean cuales fueran los motivos, debe permitir esa injusticia y falta de respeto. Eso habla en contra de nosotros, eso atenta contra nuestros principios y los de esta revolución. Es inexplicable, inaceptable tamaño vejamen y lo peor es el silencio de las autoridades, eso les hace cómplices de los paracos del volante, el silencio avala la estrategia del maltrato, la triquiñuela, la rapiña…
Debemos entender la responsabilidad que tiene las autoridades en el caso de que ocurra un hecho de sangre; hemos visto conatos, ya el año pasado jóvenes estudiantes fueron golpeados por la policía y, pongamos las cosas en su lugar, precisamente por estar en vísperas de unas elecciones claves, la oposición puede hacer de esta situación una oportunidad maravillosa para generar un conflicto de dimensiones lamentables. Hay que prevenir.
Para colmo de males la codicia viaja a exceso de velocidad y así las personas arriesgan sus vidas en autobuses que bajan por la autopista a velocidades sin límite, sin control de nadie; niños, mujeres, ancianos, hombres, estudiantes, todos parte de una tragedia a punto de ocurrir.
¿Puede alguien explicar qué ocurre, a qué se debe el silencio de los nuestros, qué pasa?
Esta campaña que hemos emprendido los socialistas, los que apoyamos el proceso ha sido sui géneris, así la ha calificado el presidente Chávez. Hemos visto al próximo gobernador de Vargas asumir personalmente la tarea de dar el ejemplo frente al dramático problema de la basura en Vargas. Estoy convencido de su sensibilidad humana; todos hemos visto su tarea con las personas en situación de abandono y su recuperación como hombres y mujeres dignos y dignas. Hemos trabajado por presentar una gestión ejemplar, esa es la mejor campaña, la de la acción constructiva, entonces aprovechemos la ocasión, hagamos justicia con los miles de usuarios, no permitamos que duden de nosotros, si somos revolucionarios nos debemos a la justicia, al respeto y a la valentía.
El Macaurelio
elmacaurelio@yahoo.es