El Opus Dei ente dirigente de la iglesia católica está exasperada porque es consciente de que el presidente Hugo Chávez tiene el apoyo popular y lo utiliza para proteger a la clase desposeída y no para dominarla, gestión inversa a el desempeño de los gobiernos capitalistas de la IV República, a quienes, la dirigencia clasista de la iglesia católica protegieron, defienden y nunca denuncian, cometan las arbitrariedades que cometan.
La clase dirigente de la iglesia católica no soportan el impulso productivo que ha puesto en marcha este proceso socialista: El rescate del la salud y la enseñanza pública para los sectores antes excluidos, no admiten la entrada al sistema público de pensiones, de la inmensa cantidad de trabajadores y estos disfruten de una vejes digna, no toleran la redistribución de las tierras con el apoyo a los trabajadores del campo, y se inicie la soberanía alimentaria, no admiten la distribución de alimentos y la administración del gobierno en el circuito alimentario garantizando alimentación a toda la población, no toleran el exitoso lanzamiento del satélite no solo al servicio de Venezuela sino de todos los países progresistas de Latinoamérica, no asimilan la construcción de la red ferroviaria que unirá al país de norte a sur y de este a oeste, es decir a estos “caballeros”, les disgusta el Bienestar y Progreso del Pueblo. Cuando el horrendo crimen en San Salvador de Monseñor Arnolfo Romero, o de las decenas de religiosos (as) asesinados en diferentes países latinoamericanos; el Opus Dei y sus aliados mediáticos, como Globo Visión ¿Que manifestaron? que expongan, el porqué enmudecieron entonces.
Esto solo nos indica la posición política que asume el Opus Dei entidad cabecilla de la iglesia católica ante estas situaciones: Visiblemente al lado de la clase explotadora y del imperialismo, olvidándose de los postulados cristianos de defender y favorecer a la clase mas desposeída y obligando al sacerdocio, estén de acuerdo o no a secundarlos en tan innoble y canalla acción. En lo personal fui formada en la creencia religiosa y mantengo esos postulados, los credos religiosos, desde mi punto de vista, es un cuestión de la vida intima de cada quien, los revolucionarios, combatimos las posiciones hipócritas y malintencionadas de quienes defienden y protegen a la oligarquía explotadora y al imperialismo y no precisamos manipular las posiciones religiosas del prójimo para defender el socialismo del siglo XXI; luchamos por la mejoras de las condiciones de vida de nuestros pueblos, por su liberación e independencia y no nos inmiscuimos en la esfera de la espiritualidad que es una cuestión individual.
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