Una solicitud económica de tremenda importancia es ocultada por nuestros medios de descomposición social, justo en momentos que la Organización de Estados Americanos –OEA-, haciendo válidas las proposiciones de los gobiernos de Colombia y Costa Rica y la complicidad de Panamá y Canadá, tomó una acción contra Nicaragua deformando decisiones territoriales soberanas nicaragüenses, provocando el bochorno de una dividida y estéril organización, insulza en su obligada defensa a los pueblos que dice representar en conjunto, para dedicarse a complacer el imperialismo yanqui adolorido porque ahora no mandan como les viene en gana en los pueblos de la América mestiza, indígena y soberana, a la cual tanto han explotado utilizando el nombre de la democracia, justificando la historia profetizada por el Libertador Simón Bolívar cuando en tiempos de lucha por nuestra independencia advirtió que esa gente parecía destinada por la providencia, “para sembrar de miserias a América en nombre de la libertad…”.
Esos capitalistas salvajes nos fragmentaron, nos dividieron y nos convirtieron en mendigos, como lo ha afirnado tantas veces el líder revolucionario Hugo Chávez, sin embargo hoy en forma lastimosa y canalla reciben apoyo de una prensa lacaya, pitiyanqui y apátrida, que deforma la opinión pública con sus diarios, emisoras radiales e inefables televisoras privadas, sobredimensionan las medidas propuestas por gobiernos entreguistas en organismos como la OEA, pero ocultan, manipulan o minimizan mediante la desinformación, hechos como la petición del Presidente brasileño LULA, quien acompañado por su sucesora electa DILMA ROUSEF, en la reunión del G-20 en Seúl y por encima de las babosadas antipopulares de pseudo líderes como Barack Hussein Obama, LULA -el primer obrero Presidente de la potencia suramericana junto a la primera mujer que va a gobernar a Brasil-, advirtió valientemente “los países ricos pueden llevar al mundo a la quiebra”, explicando claramente que “quieren apostar sólo a las exportaciones”.
Lula ha recomendado varias veces en los últimos meses a Estados Unidos y Europa, destinar recursos públicos para estimular el consumo de sus mercados internos, como lo han hecho Brasil y otras naciones en desarrollo, recordándoles a esos “ex grandes…” fracasados demócrata-representativos antisocialistas, que “los países emergentes no soportan asumir la responsabilidad de garantizar el consumo y la producción al mismo tiempo”. El presidente brasileño Lula ha solicitado que el dólar deje de ser referencia internacional como moneda, insistiendo en denunciar las maléficas peticiones descaradas de la Casa Blanca, pretendiendo una guerra cambiaria mediante la devaluación de la moneda en países como China y Brasil, lo que afectaría negativamente no sólo a brasileños y chinos, sino tambien a otros muchos países.
Una vez más Mr. Dólar fracasa en las reuniones económicas de los grandes grupos de países que antes dominaban el pensamiento económico mundial, siempre impuestos bajo condiciones bárbaras y sin tomar en cuenta las necesidades de los pueblos, consecuencia que está a punto de decirles como ya se ha hecho en las sugerencias y acciones de la ALBA -Alianza Bolivariana para las Américas-, creando el Sucre, moneda regional sugerida por Venezuela, semejante al euro, para que así se justifique juiciosamente el clamor mundial exclamando: MR. DOLAR, GO OUT.
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