Muchos son las personas que han experimentado sentir que han vivido anteriormente hechos y situaciones que están ocurriendo en tiempo real, suelen decir: “eso ya lo viví”. Esa experiencia es lo que conocemos como “Deja vu”.
Es por ello que oír, leer o ver a los funcionarios yanquis, agentes del imperialismo, haciendo las pantomimas sobre sus deseos de establecer ¿buenas? relaciones con Venezuela, pareciera un “Deja vu”.
El Gobierno de los estados Unidos con su diplomacia o política exterior, cambia los actores, pero los contenidos -política- y sus objetivos, son los mismos.
Ante el “Deja vu”, recordemos hechos históricos: “el Presidente Hugo Chávez en el 2001 cuando los EEUU bombardeó a Afganistán y el Presidente dijo: "No se puede combatir el terror con terror" y la embajadora Donna Jean Hrinak se entrevistó con Chávez pidiéndole que se retractara y nuestro líder la puso en su sitio: “…Usted le está hablando al Jefe de Estado de esta Nación. Usted es una embajadora en mi país. Usted está fuera de lugar, por favor, salga ahora de mi oficina".
Y Cómo olvidar al embajador Charles Shapiro quien jugó un papel determinante antes y durante el golpe de Estado de abril 2002”.
Hoy, en medio de la mayor ofensiva contrarrevolucionaria después del golpe de Estado y sabotaje petrolero (2001-2003), el Gobierno de Barack Obama, expresa que: les “preocupa la situación democrática de Venezuela” y reconoce que se reúne con la oposición.
A demás, están a punto de reiniciarse las relaciones diplomáticas y designar los respectivos embajadores.
El presidente Obama ¿insistirá con Larry Palmer? ¿Por qué no dejamos esa decisión para después del 8D?
