Después de las sanciones del Congreso de EEUU contra Venezuela, comparto la indignación de los altos funcionarios revolucionarios y del pueblo chavista; el imperio norteamericano no tiene moral para colocar penas a nadie en el planeta, y menos sobre derechos humanos cuando son hartamente conocidas sus atrocidades en otros países del mundo con balas, bombas, drones, misiles… criminales armas químicas, psicológicas…
El presidente Nicolás Maduro, como era de esperarse, fue el primer en reaccionar diciendo que a Venezuela no la sanciona nadie porque nuestro pueblo decidió ser libre con sanciones, sin sanciones o con gringos. Antes llamó a Obama a recuperar el equilibrio con Venezuela.
El canciller Rafael Ramírez criticó con toda razón la injerencia del imperio en los asuntos internos de Venezuela, diciendo que los EEUU están enloquecidos en una ofensiva que tienen contra todos los países a escala mundial, bombardean al medio oriente, imponen sanciones a países como Rusia y ahora pretenden hacerlo con Venezuela.
Diosdado Cabello calificó de inmoral la medida y señaló que EEUU no tiene competencia para sancionar a ningún país, al tiempo que comentó que la CIA utiliza torturas brutales como las técnicas del ahogamiento, y así por el estilo se han pronunciado otros chavistas de elevado rango, entre los que destacan la Fiscal Luisa Ortega Díaz.
Pero más allá de estas reacciones, que repito, comparto y considero pertinentes, se debe aclarar una duda que surge inevitable y que no veo se despeja con premura en función de la sanidad y transparencia del proyecto socialista en estos tiempos de corrupción: ¿Tienen o no dólares y posesiones los revolucionarios del Gobierno rojo rojito en el imperio malvado?
Y me disculpan la desconfianza, pero ya eso lo han dicho otras veces y los denunciantes no presentan pruebas convincentes y los denunciados no aclaran nada mientras crece la incertidumbre en medio de dimes y diretes.
Yo en el fondo pienso que no deben tener y que todo se trata de una maniobra gringa de cara a las elecciones parlamentarias de 20015, porque sería algo sumamente contradictorio que los rojos tuvieran activos en un imperio que desde hace 15 años enseñaron a la mayoría de los venezolanos a repudiarlo, a enfrentarlo, a que supiera interpretar cada una de sus invasiones y ocupaciones en otros países, a través de hechos que solo han dejado en el orbe desolación y muerte.
¿Cómo se podría entender que un revolucionario tenga dinero en un país que lanza drones y cae sobre hombres, mujeres y niños indefensos tan solo porque se quiere apoderar de las riquezas de otras naciones? ¿Cómo digerir que un chavista tenga bienes en un imperio que desde que El Gigante llegó al poder no ha cesado de sus intenciones de acabar con la revolución financiando hechos violentos, que causaron y causan en Venezuela destrucción y muerte, tal cual ocurrió con el Golpe del 11 y 12 de Abril de 2002 y las recientes guarimbas? ¿Cómo asumir el hecho de que se tengan riquezas en un país que sabemos quieren nuestro petróleo, y conocemos de lo que son capaces de hacer para obtenerlo?
¿Cómo comprender que se tengan activos en un país que, según el mismo presidente Maduro, tiene un bloqueo financiero en contra de Venezuela? ¿Cómo se tiene patrimonio en un país que responsabilizamos del saqueo y la miseria venezolana desde la aparición del petróleo? ¿Cómo asimilar que en esa manía loca de derrocar a Maduro, ese imperio financie a esos grupos que han hecho de Venezuela un país de colas, sin alimentos, sin medicinas y sin siquiera artículos de higiene personal? ¿Cómo percibir que un revolucionario tenga recursos en un país que está detrás de los detractores de la salud y de todas las misiones que benefician al pueblo de Bolívar? ¿Cómo entender…?
¡No, no, no! Creo que no se podría entender bajo ninguna circunstancia.
