¿Qué nueva fórmula adquiere la conspiración?

La factura golpista made in usa, se aprecia por todas las costuras de la intentona preparada para derrocar al Gobierno Revolucionario del Presidente Maduro y acabar violentamente con el Estado de Derecho y de Justicia, con plena vigencia en nuestra República Bolivariana de Venezuela. Recientemente, el canciller gringo John Kerry, se refería a la situación en la hermana República de Siria: "En última instancia se necesitará combinar diplomacia y presiones para obtener una transición política", añadiendo el insolente canciller imperial: "Podría ser necesaria una presión militar". Es la doctrina imperialista de nuestros tiempos, si el país se resiste a “transitar” hacia la “democracia” gringa y no permite que sea “gobernado” por sus agentes a sueldo, sus procónsules, entonces acude al expediente de la conspiración y el golpismo. En estos últimos quince años, mucho de ello hemos padecido, poco le importa al imperialismo de los EEUU los Derechos Humanos del pueblo venezolano; solo su ambición de posesionarse de las riquezas energéticas de nuestro pueblo es lo que le interesa. El término “transición”, proviene de las agencias de inteligencia del imperio, es su marca ineludible del ser estadounidense. Ya en abril de 2002, supimos para qué crean los EEUU, las llamadas Oficinas de Iniciativas hacia una Transición (OTI, por sus siglas en inglés). En el caso de la República Bolivariana de Venezuela, tenemos el caso inédito en que dicha Oficina aún se mantiene vigente durante estos últimos trece años en nuestro país. Durante sus dos primeros años, esa Oficina manejó un presupuesto de más de diez millones de dólares dirigidos a financiar propaganda antigubernamental y el funcionamiento de organizaciones y partidos políticos de oposición. Grupos opositores como Súmate, CEDICE, Primero Justicia, la CTV, Fedecámaras y otros, fueron los principales receptores de esos fondos, y los líderes de los esfuerzos de desestabilización en el país. Por ello, que ese documento disparador del golpe de Estado, denominado por los sediciosos como el “Acuerdo Nacional para la Transición”, desnuda a la oposición venezolana y permite apreciar, cuán poca independiente es, de las directrices del imperio de los EEUU.

  Derrotada la ambición imperialista por poner sus garras sobre nuestro petróleo, derrotado la intentona golpista, quedan fases del plan golpista que urge al Gobierno Revolucionario terminar de conjurar y desbaratar, hablamos de las guerras económica y cambiaria. No le ha resultado fácil, terminar con la guerra económica al Gobierno Revolucionario, todo lo contrario, continúa vivita y coleando; tanto, que Fedecámaras se da el tupé de marcar línea al Gobierno: “El primer vicepresidente de Fedecámaras, Francisco Martínez, aseguró que es necesario cambiar el actual modelo económico para entrar en un panorama que aporte soluciones a los problemas en materia económica. Dice que el sistema cambiario venezolano ha sido el “talón de Aquiles” del gobierno nacional” (El Aragüeño, 05-03-2015). Clama Fedecámaras, por la unificación cambiaria e igualmente, por la no intervención del Estado: “Mientras el Estado no intervenga de forma importante para evitar las distorsiones especulativas, vamos a seguir teniendo los problemas en materia de divisas. Tan grave es tener un dólar regalado a 6,30 (bolívares) como un mercado paralelo que está ahorita en los límites de 260; eso obedece a acciones netamente especulativas producto de un modelo económico que no termina de funcionar porque hay que cambiarlo”; lo cual, no es ni más ni menos que la exigencia de la eliminación del control de cambios y que sea el mercado quién determine el precio de la divisa imperialista, lo que significa, que sean ellos quienes marquen el valor del dólar, según sus intereses, como lo vienen haciendo ya con el llamado “dólar paralelo”, tomando como referente su valor en Cúcuta. La guerra cambiaria, les ha resultado un excelente negocio a la burguesía, que nos permite apreciar con nitidez su carácter rentista. No es una burguesía productiva y creadora de valores, la llamada burguesía parasitaria venezolana, trabaja es, para obtener los dólares de la República, ese es su gran objetivo económico. Un ejemplo bien claro sobre esto, nos los da el caso de los medicamentos. En 1998 se importaban productos farmacéuticos  por un poco más de 12 millones de kilos, por un valor de 222 millones de dólares, para esa fecha el mercado nacional no mostraba síntomas de desabastecimiento; para 2012, la importación de medicamentos subió, estrambóticamente, a 43 millones de kilos con un valor de 3 mil 400 millones de dólares, según cifras del INE, lo que representa un incremento del 240 por ciento; no obstante lo cual, la escasez de medicamentos es hoy una realidad en nuestro país. A dónde fueron a parar esos productos farmacéuticos que no llegan a la farmacia y, por ende, al paciente que lo requiere. En ese caso, la Fiscalía y la Asamblea Nacional han sido negligentes, no terminan de abrir sendas investigaciones sobre esos delitos que afectan un Derecho Humano fundamental del pueblo venezolano: el Derecho a la Vida.

  Si el imperialismo, no ha podido obtener su objetivo de colocar sus agentes al frente del gobierno de nuestra República Bolivariana de Venezuela, la burguesía sí ha ido logrando parte de sus propuestas de modelo económico, abrieron un boquete importante al control de cambios con el SIMADI y, en los hechos, han liberado los precios, colocándolos al referente del llamado “dólar paralelo”. Un ejemplo notable de ello, es lo que nos ocurrió recientemente al intentar comprar un paragüas, el cual no pasaba de Bs 50 hace apenas uno o dos años atrás, nos quedamos boquiabierta al preguntar por el precio de uno sencillito y, obtener como respuesta, el estrambótico precio de Bs 800, lo más notorio es que al revisar su precio en una de esas tiendas con sede en EEUU, su precio apenas llega a 8 dólares, que al hacer el cambio por 12 bolívares y aplicar la tasa que utilizan algunas empresas de transporte hacia el país, se constata que su precio no debe pasar de los 200 Bs, por lo demás, al comprar por grandes cantidades es obvio que el precio al por mayor es menor que al detal, lo que nos indica que ese precio de Bs 800, es por demás especulativo, pero la SUNDDE está de retro, al servicio pleno de la burguesía, QEPD. Que falta nos hace COMERSO, Comercio Socialista, aquel experimento social que se le ocurrió al camarada Eduardo Samán, para quebrarles el espinazo a los especuladores. Traer directamente de los mercados internacionales aquellos productos que no se producen en el país, en especial China, y colocárselo al pueblo venezolano al precio justo, el verdadero precio justo, no aquel que coloca la SUNDDE que satisface en demasía los márgenes de ganancias del especulador. Por otro lado, quienes aspiramos en alguna oportunidad que el MERCOSUR sería beneficioso para el país, aún no constatamos en qué. Los productos de ese gran mercado tienen poca presencia, seguimos atados a los productos del imperialismo, no terminamos de romper esa cadena. Solo con respuestas revolucionarias, podremos concretar la derrota definitiva de las guerras económicas y cambiarias, que siguen su curso roedor del Buen Vivir del pueblo venezolano, con toda su carga de descontento social que arrastran tras de sí.

  En la actualidad, la conspiración echa mano de su quinta columna enquistada en la Administración Pública y demás entes del Estado, para propiciar situaciones de descontento popular. Al Metro de Caracas, han vuelto los molestos retrasos del servicio en horas pico. El pasado lunes, vivimos uno de esos retrasos con un tren full de pueblo; un viaje que apenas se hace en unos cuarenta minutos, lo hicimos casi en hora y media; hasta desmayos pudimos ver, un compatriota de la llamada tercera edad, al detenerse el tren y paralizarse la circulación de aire le afectó, por fortuna unos jóvenes que estaban a su lado pudieron contenerlo y sentarlo en un asiento. Esperemos que se tomen las medidas pertinentes y se actúe, para que no ocurra como en procesos electorales previos, en que el Metro de Caracas se utilizó como escenario para propiciar descontentos entre sus usuarios y usuarias, en particular, en el trayecto que va de oeste a este, Pérez Bonalde a Agua Salud. Asimismo, nos ha tocado en lo personal, apreciar que nuestro celular con línea Movilnet, ha incrementado las señales de “Emergency call only” (sólo llamadas de emergencia), lo cual significa, según el manual del equipo, que “se encuentre en una zona que no tenga cobertura de red o que la señal recibida es demasiado débil”, y contradictoriamente, esas fallas ocurren tras el anuncio de Movilnet de su plan de expansión y mejoras de sus redes GSM/UMTS, lo que redundaría en “un mejor servicio a sus usuarias y usuarios”. Asimismo, fuimos testigos de la denuncia de los compatriotas de La Cañada del 23 de enero, quienes tienen cinco días sin recibir el vital líquido, y hacían su llamado a Hidrocapital para que les atendiera. Faltan que aparezcan de nuevo, los famosos apagones y, con ello, tenemos que denunciar el no acompañamiento de algunos ministerios a las decisiones del Presidente Maduro, como ocurre con el MPPEUCT que aún NO actualiza la unidad tributaria del beneficio de alimentación a la clase trabajadora universitaria, a los montos incrementados por el camarada Maduro desde el pasado mes de diciembre, en resguardo del ingreso de las y los trabajadores de la Patria. Y, peor aún, los estudiantes universitarios que fueron seleccionados y seleccionadas el año pasado, para recibir la Beca en homenaje al camarada Robert Serra, nada que les llega ese emolumento para ayudarles en sus estudios, burocracia inepta esa la de Fundayacucho. En definitiva, en los distintos procesos que tienen que ver con la burocracia de la Administración Pública y demás entes del Estado, hay que ponerles la lupa para no permitirle a la oposición, que ese escenario pueda ser utilizado para sus fines conspirativos contra la paz y la estabilidad de la República.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2554 veces.



Henry Escalante


Visite el perfil de Henry Escalante para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:


Notas relacionadas


Revise artículos similares en la sección:
Oposición