Los venezolanos estamos dando una renovada muestra de mentalidad positiva con una millonaria participación en la recolección de firmas por la eliminación del decreto amenazante de Obama. Felicito especialmente a los compañeros de las 486 oficinas del Servicio de Registros y Notarías (Saren) de todo el país, quienes están dando un claro ejemplo de nacionalismo irrestricto. Muchas gracias a todos.
Consolidar la paz interior debe ser un objetivo común para todos los que habitamos esta patria maravillosa. Estoy persuadido de que este es un gran momento de revolución intelectual. Hora de pensar en grande, de poner nuestros cerebros alineados con buenas ideas y mejores sentimientos para fortalecer la patria y la unión nacional, para afianzar la justicia, consolidar la fraternidad. Para proveer la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, nuestra posteridad y todos los seres humanos del mundo que quieran habitar en el suelo tricolor.
En el planeta se aplican ya principios sociales que venimos instalando para dar vida a los que hasta ayer eran millones de seres anónimos sin ningún derecho, ni siquiera a estudiar, comer, ir al médico o tener una cédula. Hacemos todo para consolidar la organización social, para transformar su debilidad individual en fuerza colectiva, reforzando la independencia, la libertad y el poder originario del individuo.
Es posible que estos cambios que nacen con nuestra Constitución afecten a una minoría que tenía todos los beneficios y ventajas en la Cuarta. De ahí la resistencia violenta a la transformación positiva para todos. Venezuela tiene múltiples escenarios de lucha y uno de ellos es el económico, con un desencadenante en la brutal baja del precio del petróleo y repudiables maniobras de distintos tipos que dañaron criminalmente el abastecimiento.
En nuestra jurisdicción está la responsabilidad de la erradicación del burocratismo y todas sus formas delictivas que han afectado al conjunto de la administración pública en todos sus niveles. Hemos avanzado. Los récords de eficiencia son noticia diaria en todas las notarías y registros.
Coincido con Simón Bolívar cuando aseguró: "Los empleos públicos pertenecen al Estado; no son patrimonio de particulares. Ninguno que no tenga probidad, aptitudes y merecimientos es digno de ellos".
Cada uno haga bien su tarea y seguramente formaremos una patria grande, justa, libre y soberana. Todo lo demás será tolerable. Nuestros hijos lo exigen.
