Aunque confiamos en la sabiduría e inteligencia de los pueblos, hecho que no permitirá que sean manipulados fácilmente a través de la guerra mediática que ha desatado el gobierno norteamericano en contra de Venezuela y su gobierno, queremos rechazar informaciones lejanas de la realidad, publicadas en la prensa que circula en países vecinos y amigos, y que lastimosamente encuentran eco en algunos funcionarios oficiales desprevenidos y desconocedores de la verdad.
Hace dos semanas (el 17-03-2006) apareció en el diario “Amigoe”, que editan en Curazao y circula en las antillas nederlandesas, un artículo firmado por un supuesto Asesor en Delitos Financieros, de apellido Rijock, quien paradójicamente comete el delito de mentir justamente sobre la situación financiera de nuestro país (Venezuela), que nunca -en los últimos cuarenta años- había estado en mejor forma.
Hoy en día, con la globalización y diversidad de la información, además de la facilidad de acceder a ella, cualquier persona puede indagar a través de la red informática (Internet) en las páginas Web de organismos financieros internacionales, públicos y privados (FMI, BM, ONU, FAO, o Standard & Poors y otras calificadoras de riesgo), para enterarse de que desde el momento en que comenzó la administración liderada por el Presidente Chávez, la economía ha venido creciendo a uno de los ritmos más altos de América Latina y del mundo. Este crecimiento solamente se obstaculizó en el año 2002 y comienzos del 2003, debido al golpe de estado (apoyado por el gobierno de los EEUU) que se produjo en contra del gobierno legítimo de Chávez, y el paro petrolero protagonizado por quienes desde gobiernos anteriores manejaban la principal industria del país sin que ésta le produjera beneficios directos ni indirectos a su población.
Afortunadamente el único alzamiento popular de los últimos años se produjo para reponer al Presidente Chávez al frente de su gobierno. El pueblo venezolano hizo respetar el hecho de haber sido electo en dos justas electorales como Presidente del país. Al siguiente año, Chávez enfrentó exitosamente un Referendo, por lo que podríamos decir que -históricamente- es el presidente con mayor grado de legitimidad del mundo actual.
En los últimos días se ha divulgado la noticia de que somos el país con las mayores reservas petroleras del mundo y tal vez allí reside el leit-motiv principal de quienes conducen el gobierno de los EEUU, en cuanto a pretender poner sus manos en esta riqueza venezolana. Y por eso nuestro país, al igual que ayer Irak, corre el riesgo no sólo de ser agredido militarmente, sino también y como lo estamos viendo, de ser blanco de críticas insanas basadas en mentiras, colocadas en medios de comunicación que aparentemente sirven de plataforma para la agresión mediática. Estos mercenarios de la información creen que la gente es estúpida, creen que pueden manipular fácilmente a las personas con ideas tan disparatadas, como si hoy la gente no pudiera cotejar o contrastar las desinformaciones con los hechos verdaderos, y leer en las pantallas de sus computadoras, periódicos de todos los países; o viajar -si se quiere estar mejor informado- a lugares tan cercanos como nuestro país, para conocer la verdad.
Además está presente la vieja treta de asustar a quienes leen y creen de buena fe, utilizando otra vez el machacado argumento de la “posible” existencia de armas sofisticadas a las que pudieran colocársele “pequeños pero efectivos dispositivos nucleares”, advirtiendo distraídamente sobre los daños ecológicos permanentes que se crearían en el Caribe. A esto le suman la descalificación y el irrespeto al Presidente de una república democrática y soberana que lleva adelante una revolución pacífica y ha dado muestras reiteradas y suficientes de compartir los beneficios que produce el petróleo que posee, como fuente energética, facilitar su comercialización y consumo sin intermediarios, y mantener relaciones de bienestar y de paz entre los pueblos, a través de la creación de la empresa internacional e integradora llamada PetroCaribe. La campaña se produce con el ánimo de colocar a los lectores y receptores de estos medios, del lado de los potenciales agresores, como cuando argumentaron todas las mentiras posibles para invadir y destruir a Irak. Y, a pesar de “reconocer” que se mintió, mantener una agresión repudiada cada vez con más fuerza en todo el planeta.
El supuesto asesor no quiere que sus lectores recuerden el caso de Irak y pretende que la gente no tome en cuenta esa agresión que es la que tenemos más cercana y más reciente, pero utiliza los mismos argumentos: 1. -Que Venezuela se está armando (con armas ofensivas y peligrosas) para desatar una guerra que sólo está en la imaginación del articulista inglés, al recordar -tal vez- las novelas de su paisano Ian Fleming y su imbatible 007; y, 2. -Que Chávez no es más que un dictador que necesita distraer a su pueblo por el mal gobierno que le está proporcionando.
Pues para que sepan los lectores de este importante medio de comunicación, todas las encuestadoras le dan ventaja a Chávez frente a cualquiera de sus adversarios de la oposición. Ventajas porcentuales que varían entre 40 y 80 puntos se aprecian en sondeos de opinión sobre la aceptación que tiene el Presidente Chávez entre los electores venezolanos, con miras a su reelección en diciembre del 2006, realizados por empresas no precisamente gubernamentales sino transnacionales con agencias en Venezuela.
La economía venezolana ha venido creciendo a un ritmo promedio de más de 10 puntos en los últimos dos años. Sus reservas internacionales superan los 29 mil millones de dólares, colocadas en su mayor parte en Euros, en Basilea, Suiza; y en dólares una pequeña cantidad, (al tomar en cuenta el crack técnico que muestra la economía norteamericana, con su deuda nacional en el punto más alto, dato que convierte a los EEUU en el país más hipotecado de la historia. Con decirles que Bill Gates ha declarado que no guarda sus reservas personales en dólares..!). El índice de inflación en Venezuela es el más bajo observado en los últimos 18 años, su calificación en cuanto a riesgo-país es la más baja de los últimos 20 años y se estima que el crecimiento para el presente año (2006), va a alcanzar el 10 %.
Por otra parte, las relaciones con el gobierno de Cuba están basadas en intercambios comerciales, científicos, educativos y deportivos, y de atención en salud, a la vista de todo el mundo. Los recursos económicos que la administración Chávez le ha asignado a la atención en salud, no solamente ha permitido que 20 millones de venezolanos tengan ahora acceso a la salud, gracias a la solidaridad de los médicos cubanos, sino que esos programas de atención han sido extendidos a hermanos latinoamericanos de Colombia, Perú, Bolivia, etc. quienes también han recibido los beneficios de esta política. Mientras tanto en los EEUU la clase media no puede pagar las cuentas de hospitales, y 45 millones de personas no tienen acceso a la salud.
Como dato adicional, la empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA) a través de su filial en los EEUU, “CITGO”, fue la única empresa de este tipo en colaborar directamente con las víctimas del huracán Katrina y ha adelantado programas de ventas de combustible, a precios reducidos, para beneficiar a comunidades pobres y comunidades indígenas, en los Estados Unidos.
Si hablamos de terrorismo y de “armas ofensivas”, en los EEUU el 25 % de la población tiene al menos un arma de fuego. Desde el asesinato de Kennedy hasta nuestros días, han muerto por herida de bala, más de un millón de estadounidenses. Ni con 16 guerras de Vietnam hubiesen logrado matar más ciudadanos de ese país. En Venezuela, como en muchas lugares de nuestro planeta, creemos con Michael Moore, que para acabar con el terrorismo en el mundo deberíamos acabar con las armas de destrucción masiva de los países que han matado a más gente (y siguen haciéndolo en este momento) que el resto de las naciones “nucleares” juntas, como lo son EEUU y el Reino Unido. Venezuela solamente compra armamento defensivo ante la potencial agresión que estudian, tienen entre sus planes y preparan, los genocidas que comandan el gobierno actual de los EEUU. Y lo ha comprado en otras naciones porque el Departamento de Defensa norteamericano no quiere venderle repuestos ni siquiera para mantener con vida útil los viejos aviones y demás armamento que en otros tiempos le vendió.
No quiero dejar de advertir que la cosas han cambiado bastante en el mundo y especialmente en Latinoamérica. Y en la patria del columnista Kenneth Rijock las cosas parecen ir al revés, hasta para él. Vimos los abucheos públicos dedicados la semana pasada a su ministro Jack Straw acompañado de Condoleeza Rice, en cuanto lugar aparecieron juntos. Ya antes pudimos ver a los “bobbies” londinenses, ahora armados, matar a una persona por el sólo hecho de considerarla sospechosa, y anteriormente apreciamos que hasta los cuentos de hadas andan en contravía en ese país, puesto que la princesa (D) murió y el príncipe (Ch) se casó con la bruja (C). ¿Qué más podemos esperar?
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