La contra-revolución y la contra-reforma de factura USA están envalentonadas en nuestra América.
Brasil está en turno después de Argentina y Venezuela está en la mira del cohete imperial, en fase de erosión previa un pretendido y difícil golpe en el epiplón.
No es poca cosa lo que está pasando y lo que puede suceder. Son muy graves sus implicaciones.
Hay que tensar las fibras para contener la ola de golpes maquillados: golpes de Estado desde mayorías congresuales espurias y mafiosas, acompañados de golpes mediáticos, a cargo del lumpen imperialismo gringo y de sus lumpenes burguesías locales. Golpes seudo-institucionales y golpes de mafias electorales y empresariales.
EL JUICIO POLITICO COMO DISFRAZ DE UN GOLPE SINGULAR.
No tengo la más mínima duda que el “juicio” a la presidenta Dilma Rousseff no es un juicio ético- moral, sino un recurso perverso de gente perversa donde lo político al servicio de la contra-reforma gringa y del interés de desplazar al PT por fuerzas peores está sobredimensionado para retorcer los procesos institucionales del propio Estado capitalista de Brasil e imponer un neoliberalismo rampante y degradado; y, sobre todo, imponer un nuevo estatus político que posibilite convertir a esa potencia emergente en un factor totalmente alineado a la estrategia de dominación estadounidense en la región, y muy especialmente a los planes militares del PENTAGONO y a su empleo para apoderarse de los valiosos recursos naturales de Suramérica.
Todo parece indicar que este podría ser el próximo gran golpe de la contraofensiva imperial y a ningún antiimperialista consecuente le luce una actitud pasiva, indiferente o neutral frente a esos propósitos ominosos con evidentes consecuencias nefastas para Brasil, Nuestra América y el mundo.
Yo y las organizaciones en que milito en la República Dominicana nos ubicamos, sin la menor vacilación, entre los/as que a escala nacional e internacional nos solidarizamos con todas las iniciativas y luchas destinadas a evitar ese nocivo retroceso; que evidentemente -en el contexto de un imperialismo decadente, voraz y altamente destructivo- tiene implicaciones mucho más funestas que la simple restauración neoliberal.
DIFERENCIA EN LA COINCIDENCIA.
En lo que posiblemente nos diferenciemos de otras fuerzas solidarias por el destino de los logros y anhelos del pueblo brasileño, es en lo de no exculpar a la alta dirección del Partido de los Trabajadores-PT de Brasil, incluido Lula -y en mucho menor medida la presidenta Rousseff- de la responsabilidad de haber facilitado tan trágica posibilidad.
-Por las prácticas de sobornos, privilegios, clientelismo y alianzas espurias en el ejercicio político.
-Por las evidencias de alta corrupción “petista” en PETROBRAS.
-Por su asociación delictiva con cuestionados cárteles de la construcción como ODEBRECH y Gutiérrez ANDRADE tanto a nivel nacional e internacional (nuestro país incluido entre sus presas).
-Por el uso en tráfico de influencia internacional, en asesoría en campañas electorales y de imágenes, en gestiones de gobierno y en cabildeos para financiamientos de esos servicios, a cargo de POLITIKA-JOAO SANTANA, hoy procesado en Brasil.
-Por escoger, a cambio de repartos de cargos y principalías, aliados no confiables, con largos y comprobados prontuarios de transfuguismo, corrupción y oportunismo político; destacándose ahora el caso del VICEPRESIDENTE TRAIDOR y su partido MDB.
-Por no haber aprovechado el periodo de alta popularidad de LULA y del PT y las “vacas gordas” del auge de las exportaciones y los “comodities” para emprender los cambios estructurales a nivel de sistema político, régimen de propiedad, concentración de los ingresos, financierización del sistema, estructuras agrarias, depredación ecológica, salud, educación…; concentrándose fundamentalmente en significativos y justos cambios en la distribución del gasto público a favor de los/as muy pobres, con logros muy loables, aunque algunos de ellos pueden resultar temporales, dado el peso del asistencialismo.
-Por el derroche de recursos en la realización del mundial de futbol a costa de los programas de educación.
-Por la permisibilidad a las elites financieras en la obtención de las más altas ganancias en la historia de Brasil.
En fin, por hacer una gestión de gobierno que finalmente resultó vulnerable.
DILMA CARGO CON LO AJENO Y LO PROPIO. ENSEÑANZAS
A Dilma le tocaron la herencia del acumulado de corrupción en la cúpula del PT y la “vaca flaca” del descenso de las exportaciones, la depresión económica.
La primera, la enfrentó inicialmente con cierta valentía y también con algunas ambigüedades, lo que posiblemente la debilitó a nivel de la alta dirección del PT y en sus estructuras corrompidas, sin lograr revertir totalmente la herencia negativa.
La segunda, dejándose empujar al oropel del futbol, para luego optar por un injustificable paquetazo de puro corte neoliberal que precipitó la impopularidad de su gestión y envalentonó a las cavernas políticas del Norte y del Sur hasta proponerse este grotesco “juicio político” como disfraz de un golpe mediático y seudo-institucional-
No es solo odio. Es mucho más: es aprovechamiento de la oportunidad para contra-atacar y golpear en la madre y el padre del proceso reformista. Es revancha mafiosa contra lo que atentaron contra su hegemonía, aun fuera limitadamente, usando el chance brindado para volver más que atrás: para intentar controlar estratégicamente un territorio fabuloso y un potencial industrial-militar enorme.
Es más que odio en lo político y lo personal: es venganza por el “pecado original” del PT, Lula, Dilma, Dirceu…independientemente de los esfuerzos de esos dirigente para quitarse la “mancha indeleble” del socialismo revolucionario, de las guerrillas, de la subversión comunista.
La clase dominante y el imperialismo, más cuando se gansterizan, son implacables, no importa que el grado de re-negación de sus adversario sea moderado o radical.
Dos lecciones:
1) El imperialismo de hoy es peor que el de ayer por su agresiva decadencia.
2) Es un grave error no profundizar los cambios que se emprenden en nombre de las izquierdas y del pueblo explotado y excluido, y es todavía peor imitar a las derechas en la gestión de poder: se pierde pueblo y vuelven a retomar bríos y más poder las peores derechas.
¡Aprendamos de esas enseñanzas para que la nueva democracia y el nuevo socialismo puedan tener presente y futuro!
