Rafael Ramírez, expresidente de PDVSA, y ahora enfrentado con la administración de Nicolás Maduro, publicó recientemente, en una carta abierta, algunos comentarios sobre la relación económica del actual Gobierno de Venezuela con el Imperio estadounidense:
"El Gobierno (de Venezuela, dirigido por Maduro), de manera secreta, ha tratado de establecer algún tipo de pacto con el imperio (EE.UU.), pero este quiere la entrega de todo", precisa Ramírez en una carta abierta, publicada este domingo en el diario venezolano Panorama.
Ramírez que fue 12 años ministro de Petróleo, una década presidente de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y representante del país en las Naciones Unidas, cargo último del que renunció el pasado diciembre, reveló que "emisarios especiales y ministros han ido a Estados Unidos a "ofrecer acuerdos".
Asimismo, precisa que los acuerdos incluyen "oportunidades petroleras", como "volver a la Faja Petrolífera, incluso explotar de conjunto las áreas limítrofes del país usurpadas por ellos (EE.UU.) de facto", pero, "ni siquiera los recibió el presidente de la empresa. Las transnacionales lo quieren todo’, según el texto" https://www.hispantv.com/noticias/.../rafael-ramirez-pdvsa-maduro-pacto-eeuu
En buena parte tiene razón el señor Ramírez, considerando que en vista de la crisis económica que azota fuertemente a Venezuela y de los problemas financieros de PDVSA, el Gobierno de Maduro seguramente otorgará o ya otorgó inmejorables ventajas de inversión a las transnacionales petroleras, obviamente en perjuicio de la soberanía del país caribeño. Ahora bien, lo que Ramírez nunca admitirá es que desde que Hugo Chávez asumió el poder y con ello el advenimiento de la "Revolución Bolivariana" en 1999, es que Venezuela siempre ha estado de rodillas ante el gran capital estadounidense, más allá de la retórica antiimperialista. Y es que el mismo Ramírez fue una pieza clave en acuerdos desventajosos entre la "Revolución" y ciertas transnacionales petroleras estadounidenses; Ramírez que intenta darse a conocer a la opinión pública como un gran defensor de la libertad y la soberanía económica de Venezuela, fue tal cual como tantos funcionarios oportunistas y codiciosos disfrazados de socialistas, y se arrodilló ante el alto capital local y foráneo, incluyendo el estadounidense, al que irónicamente atacaba con la lengua y con la pluma.
Entonces Rafael Ramírez, está bien que usted acuse de entreguista al nefasto Gobierno de Maduro, tan populista y procapitalista como cualquiera de los del periodo puntofijista, pero admita que usted como funcionario bien influyente en la política petrolera venezolana desde la administración de Chávez, siempre estuvo de rodillas ante Estados Unidos, importándole un bledo todo eso de la soberanía y la independencia.