Resulta sospechoso que el señor García Belaunde, representante del gobierno peruano que preside Alan García, emita las declaraciones que ofreció a algunos medios de comunicación en la hermana república de Brasil. En efecto y en apoyo incondicional a nuestro canciller Nicolás Maduro debo reiterar aquí lo que ya en otra oportunidad señale: La posición asumida por Venezuela en la discusión del puesto no permanente en el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas ha sido una muestra clara y terminante de los nuevos tiempos que se viven en América y el mundo. El solo hecho de obligar al imperio del norte a tener que buscar refugio en un candidato de consenso, en este caso Panamá, dice a las claras cuan débil se encuentra el otrora invencible imperio y es un claro mensaje a la humanidad con respecto a la necesidad de mantener posiciones de dignidad, patriotismo, autodeterminación, soberanía e independencia. Estas son las posiciones que incomodan a personas que, como el representante del gobierno peruano, no tienen ningún empacho ni recato para rendirse ante los pies del genocida George Bush. El triunfo en ese caso fue para la dignidad de los pueblos representados en la valentía de nuestra delegación al enfatizar que nuestra lucha no era tan solo por un puesto, el cual Venezuela ha tenido en otras oportunidades, sino por el respeto a la ética en las relaciones entre las naciones y a la necesaria interpretación de la autonomía que tiene cada nación de tomar sus decisiones sin ser presionada o chantajeada con base a sus necesidades económicas o sociales. En cuanto a la supuesta derrota de nuestro Presidente en Perú ella solo existe en las mentes mezquinas y tarifadas de los serviles del pentágono norteamericano. En Perú como en la América toda hay un nuevo despertar hacia los caminos de la libertad, la dignidad, la soberanía, la independencia y la autodeterminación de los pueblos en base a sus propias características y no bajo el fuego implacable del chantaje, las amenazas y el abuso incesante del poder de quienes pretenden seguir teniéndonos como su patio trasero. Lo de Ecuador es una de las más absurdas mentiras que representante diplomático pueda expresar.

El amo de los Garcías, Belaunde y Alan, el señor George Bush está tan desesperado por la contundente victoria diplomática de Venezuela en la O.N.U, el triunfo de Evo Morales en Bolivia, de Tabaré Vásquez en Uruguay, la reelección de Lula en Brasil, el triunfo de Daniel Ortega en Nicaragua, su propia derrota en el parlamento norteamericano, su fracaso en Irak, Afganistán y en general en el medio oriente que no tiene ningún tipo de pudor en enviar a sus mandadero a tratar de desprestigiar a Hugo Rafael Chávez Frías por ser nuestro líder una piedrota en el zapato que le dificulta su camino en la intención de someter a todos los pueblos a sus caprichos. Señor García Belaunde cuando tenga una oportunidad haga una visión retrospectiva de la historia de la hermana república del Perú y de la América toda y tal vez, solo tal vez, usted podrá darse cuenta del pobre, triste y sucio papel que está haciendo como títere del gobierno más asesino de la historia de la humanidad. Hoy en día, señor Belaunde, la política exterior es muy diferente y representantes de nuestros países como Pérez Roque de Cuba y Nicolás Maduro de Venezuela, entre otros, han dado muestras contundentes acerca de la verdadera vocación de libertad y dignidad de los pueblos de América y el mundo. Como venezolano, como hombre amante de este proceso revolucionario que hoy vivimos y que he abrazado desde mi infancia, manifiesto mi apoyo a la posición honesta, clara y sin ambajes que ha asumido nuestro canciller y llamo a la reflexión de todos los militantes de este proceso revolucionario a cerrar filas en la defensa de la política exterior de la Revolución Bolivariana y en defensa de los logros alcanzados por nuestra revolución.

La Revolución Bolivariana sigue siendo un punto de reflexión y esperanza con optimismo de los pueblos de América y el mundo. Esta revolución traspasa las fronteras continentales y se proyecta hacia el mundo como una mejor forma de vivir en justicia, igualdad, libertad, soberanía e independencia. APOYEMOS A NICOLAS MADURO EN LA DEFENSA DE NUESTRA REVOLUCION EN EL CONCIERTO DE LAS NACIONES.


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