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Son los señores del imperio esos que producen de todo a reventar, y quienes han encharcado de sangre el planeta y que por donde pasan van reventado pueblos que luego éstos, alucinados por el hambre y las modas, cogen enceguecidos hacia el abismos de los "sueños americanos" como otra forma de seguir muriendo esclavos, envilecidos, imbéciles.
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En el vientre de esa gran bestia llamada EE UU se cuecen seres de todas las razas en una carnavalada de jolgorios pasmosos, de indolencias, inconsciencias y brutalidades... Son los que creen haber alcanzado la "salvación", por tener al alcance de sus tuétanos, los rutilantes centros comerciales, los espejismos del progreso y los goces del más repugnante sensualismo.
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Nadie emigra a EE UU para hacerse más culto ni más humano, sino que es un trasiego que se hace por un perverso egoísmo personal, porque allí se suele encontrar la madre de todas las disipaciones, distracciones y "entretenimientos" en las que se pretende resumir una absurda metáfora de felicidad.
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Todo el que emigra a EE UU cambia su progenitura por un plato de lentejas en lata...
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La palabra GRINGOS (entre las mejores versiones) data de la época de la Guerra Mexicano-Estadounidense, cuando los yankees vestían uniformes verdes y los mexicanos les gritaban "¡greens go!" (¡verdes, fuera!). Es decir, que los gringos son los yankees invasores, y entre ellos, por supuesto, no podemos incluir a geniales norteamericanos como, por ejemplo, Walt Whitman, Edgar Allan Poe, Mark Twain, Jack London, William Faulkner, Henry Miller, Teodoro Dreiser, Francis Scott Fitzgerald, J. D. Salinger, William Burroughs, Ambrose Bierce, Ernest Hemingway, T.S. Eliot, Truman Capote, etc.
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A excepción de la clase de personajes antes mencionados para mí no hay ninguna diferencia entre eso que se llama "pueblo estadounidense" y gringos. Esa masa amorfa que calla y otorga todo lo que hacen sus criminales transnacionales es tan canalla como sus presidentes amorfos, enfermos, desquiciados.
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¿En qué país decente, culto y humano podría gobernar un miserable como Donald Trump? Y hay que recalcar que como Trump también tuvieron sus veleidades miserables y racistas sujetos como el mismo Thomas Jefferson, Andrew Jackson, James Monroe, seguido por Teodoro (Teddy) Roosevelt, Franklin Delano Roosevelt, Harry (El Sucio) Trumann, Ike Eisenhower, Richard Nixon, Lyndon B. Jhonson, Ronald Reagan, los Bush (padre e hijo), Bill Clinton y Barack Obama.
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Los grandes cerdos de The New York Times, The Washington Post, Time, CNN, ABC, CBS, Fox network, proclaman como justo, necesario y grandioso cuanto deciden sus monstruosos presidentes y ministros.
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La bestia de Trump amenaza y condena con sus bestialidades a Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia, Siria, y los grandes cerdos de The New York Times, The Washington Post, Time, CNN, ABC, CBS, Fox network le aplauden. Y si el día de mañana deciden invadir a Venezuela, por ejemplo, colocarán en sus titulares: "…restorin democracy…".
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Qué difícil es vivir en este mundo, regido por los mayores canallas de la tierra, precisamente los que deciden que es bueno y que es malo... O sea…
