La negativa del pueblo venezolano de plegarse a las pretensiones imperialistas de hacer de Venezuela una colonia norteamericana y que se manifestó de manera notoria a raíz que el presidente Chávez impulsara en nuestro país un gobierno revolucionario y antiimperialista que busca de manera decidida enrumbar a la patria hacia una democracia socialista; legado nada fácil que el presidente Nicolas Maduro asume hoy.
Hoy el imperialismo desarrolla una guerra que por sus características tiende a convertirse en una guerra prolongada, las manifestaciones de los halcones de la guerra norteamericana no esconden sus nefastas intensiones. El asedio a Cuba con 60 años de bloqueo e Iran con 40 años de acoso. Hoy en nuestro país continúa el imperio las acciones desestabilizadoras contra nuestro país; ahora se le une el saboteo eléctrico. Un gran reto tenemos por delante como es su aislamiento y derrota. Esta es una tarea política a enfrentar por todo un pueblo. Los venezolanos amantes de la paz estamos en la obligación de organizar fuerzas para desarrollar en el seno del pueblo jornadas políticas e ideológicas que aclaren esta realidad de guerra prolongada, que nos la impone bajo las mas disimiles manifestaciones el gobierno de EEUU. Retomar las máximas bolivarianas de moral y luces para que en todos los espacios se debata sobre estos problemas en caso de continuar las agresiones a la patria. Recordemos al Libertador cuando dijo "que nos han dominado más por La ignorancia que por la fuerza"
Mas allá de la lealtad de las FANB y de la Defensa Integral de la Nación: requerimos para apoyar al pueblo en armas de una fuerza laboral con clarísima conciencia de clase para el desarrollo de una acción en la defensa de la soberanía de todo un pueblo Claro, para vencer en la guerra los mandos militares deben combinar valor consciente y valor natural y quienes tengan algún liderazgo; llámese gerencial, burócrata, en instituciones, en empresas del Estado, etc; tienen que estar comprometidos con la defensa de la patria; para salir airosos en esa guerra prolongada estamos obligados, a rectificar en la política de designación funcionarios en las empresas y cargos de responsabilidad administrativa a individualidades que llenen los requisitos de lealtad a la patria.
La captación que busca hacer el imperio entre funcionarios del Estado; ofreciendo considerables sumas de dinero que ha permitido quebrar la moral y la ética de funcionarios que no han aguantado dos pedidas. No ha hecho mella en el sentimiento patrio del pueblo; solo un grupúsculo se ha plegado a esas posiciones inusuales, malsanas y traidoras. Tenemos que analizar y enfrentar la guerra prolongada contra la patria de Bolívar y Chávez. Esta tendrá que pasar; por rectificar en los lineamientos organizativos partidistas y funciones de los legisladores, concejales, alcaldes y gobernaciones; en algunos casos no están a la altura para repeler, enfrentar y resistir en un conflicto de verdadera magnitud. Continuaremos abordando el tema como una necesidad de los lineamientos políticos organizativos.
