Que ahora tengamos como aliados a países como Rusia, China, Iran, Turquia, Cuba, no es de alarmarse, todo país en función de las alianzas que haga siempre está por medio el interés económico. Inglaterra para la época de la emancipación americana buscaba afanosamente mecanismos que la condujeran para apoderarse de ese gran mercado que representaba las colonias. EEUU, no solo marcho distancia en relación al proceso independentista; sino que contribuyo con el envío de armas y municiones a los ejércitos realistas. Recordemos a las dos goletas: Tigres y Libertad que fueron capturadas por el Libertador en fechas distintas a medianos de 1817 en el rio Orinoco, cuyo propietario era Mr. John Baptist Irving. Thomas Jefferson en 1781 no tuvo el recato Al decir que "Es necesario posponerla (nuestra emancipación) hasta que los EEUU puedan beneficiarse de ella y no Inglaterra".
Es así como Gran Bretaña entra por la puerta grande al apoyar los movimientos libertadores que no lo hizo para "ayudar" a estos sufridos combatientes que luchaban para librarse del yugo español; sino lo hacían por conveniencias económicas y financieras. Ella necesitaban afanosamente todas nuestras riquezas y una parte del nuevo mundo se la estaba brindando en bandeja de plata. Hubo cierta resistencia por parte de los patricios en recibir la "ayuda"; pero Bolivar quien tenía un ojo clínico, para interpretar que si continuaba peleando solo con un imperio tan poderoso como el español; no podía cerrarle las puertas a otras potencias que ofrecían su ayuda sobre todo en el suministro de equipo bélico. De ahí que Bolívar desde Angostura el 31 de octubre de 1817, le escribía a Lopez Mendez, Comisionado Especial de Venezuela ante el gobierno Ingles, una carta donde señalaba: "Si nosotros despreciamos la ventaja que nos ofrece el interés de la Gran Bretaña en sostenernos, y los principios inalterables de su conducta, siempre justa, siempre magnánima para proteger al débil y al inocente, nuestros esfuerzos quedaran circunscritos a la efímera gloria de combatir constantemente y de probar a la tiranía que antes que vencer".
Los empréstitos ingleses se hicieron efectivos a través de convenios no muy favorecedores a los países deudores, ademas a onerosas tasas de interés, de descuentos y pagos de comisiones. Lo cierto es que estas ayudas vinieron también a través de armas, municiones y manufacturas; Así como el envío de tropas mercenarias al mando de oficiales ingleses e irlandeses; donde la mayor tajada se la llevaban las navieras que transportaban las milicias. Hay que destacar que parte de estos empréstitos fueron dilapidados por el Comisionado Francisco Zea, colombiano para mas señas, en francachelas por Europa y por el "hombre de las leyes" Franscisco de Paula Santander a partir de 1819 como responsable de gobierno, las consumió a través del pago de asignación, mantenimiento, dotación de armas, etc. Gran parte de las rentas estadales, nutridas a base de empréstitos ingleses y los emolumentos que recibían los mandos militares, no se compadecía en lo más mínimo con la existencia de una Hacienda pública débil y exhausta.
Ahora bien, muchos de esos apátridas que hoy se escandalizan porque el gobierno del presidente Maduro le abre las puestas a otras naciones, cuyo interés es tener relaciones bilaterales de libre comercio; pero guardan no solo silencio sino azuzan a Trump a invadirnos y de esta manera convertirnos en una franquicia de subordinación a los intereses gringos.
