Según estadísticas oficiales de la ONU, Venezuela no aparece como productor de droga; por el contrario este mismo organismo, lo ubica como cuarto país en el mundo en decomiso y combate contra la droga. No obstante de la existencia de estas dos distinciones, tenemos a un gobierno norteamericanos con una guerra frontal que arremete contra nuestro país, acusándonos de "narco estado". Como forma de amedrentamiento e intimidación y una posible invasión, ha colocado en la puerta de entrada del Caribe un cordón de naves; dizque para enfrentar la droga que sale por Venezuela; a sabiendas que el 93% de la droga que sale de Colombia lo hace por el Pacifico y el 7% por el Caribe. Todo esto bajo el escenario que Colombia tiene el "honroso" lugar de ser el primer productor de droga en el mundo y the American way of life el primer consumidor del mundo.
Ese contubernio rastrero de EEUU y Colombia lo utilizan para atacar a Venezuela; pero se ha acrecentado con la presidencia de Álvaro Uribe (2002 – 2006) y ahora con el cipayo Iván Duque. Es bueno sacar una fotografía de Uribe, por allá en 1980, fue Director de Aeronáutica Civil durante el gobierno de Turbay Ayala, le concedió licencias a aviones y helicópteros a la crema innata del narcotráfico, otorgo la bicoca de 2242 licencias, más del doble de las que se habían dado hasta la fecha. Siendo senador se vinculo con el cartel de Medellín y Pablo Escobar. Estuvo metido en un negocio de narcotráfico en las propias entrañas de EEUU. Su padre fue asesinado por estar incurso en actividades con el narcotráfico. Es largo el historial de fechorías, de asesinatos, corruptelas de este yonofui con carita de monaguillo que ha logrado engañar e imponerse y todavía continúa con toda su desfachatez gobernando a Colombia, contando con todo el respaldo y apoyo de Trump. Alvaro Uribe está en la mira de EEUU con el numero 82 como narcotraficante, de ahí ese arrastramiento ante las imposiciones gringas para no ser detenido y extraditado. Sobre este multimillonario señor de la droga, existe mucha literatura; lo último ha sido una serie llamada Matarife, donde se narra gran parte de su prontuario delictivo; sin embargo sale airoso de cualquier señalamiento, los expedientes o son archivados o son dados por perdidos, bien sea por complicidad o temor a represalias. La mayoría de sus acompañantes durante su gobierno, están encarcelados, huyendo o han sido extraditados a los EEUU.
No es un secreto para nadie que Iván Duque gano las elecciones presidenciales en el 2018 con votos comprados al narcotráfico de los Departamentos de la Guajira, Magdalena y el Cesar, a través de un célebre personaje ligado a estos menesteres drogariles, ya desaparecido llamado José Ñeñe Hernández y que hoy esas vinculaciones no solo es del conocimiento de la opinión pública; sino que ya este caso está siendo ventilado por el congreso como la ñeñe política; otra que también aparece salpicada en este enojoso caso del narcotráfico es la propia vice presidenta María Lucia Ramírez; ósea que si no lo agarra el chingo , lo agarra el sin narices.
Cada vez que ese inefable huésped de la Casa Blanca necesita oxigenarse, por baja popularidad, lo tiene acorralado el coronavirus, el racismo o la irrupción de las águilas negras en la sociedad afroamericana para salirle el paso a la supremacía blanca, como consecuencia del asesinato brutal de George Floyd por parte de un policía blanco; salta de su asiento y al primero que se le ocurre lanzarle su andanada de ataques es Venezuela y Maduro, a través de sus flake news. Al igual que la oposición apátrida venezolana sueña con el presidente Nicolás Maduro y todo es Maduro…Maduro. A Venezuela la acusa de "narco estado" y "terrorista" y dizque es una amenaza para Norteamérica. En la última alocución soltó la perla, diciendo que "Venezuela era un país rico hace 15 años y ha sido destruido por dos personas (sic) y algo grande va a pasar en Venezuela, es todo lo que puedo decir". Es bueno agregar que en guerra avisada no mata soldado y si muere es por descuidado.
