Cual seria nuestro asombro cuando buscando en una página Web de juguetes un obsequio para nuestro pequeño hijo y nos apareció un muñeco de Sadam Hussein en la horca ofrecido para niños.
Hasta eso han llegado los gringos con sus disparates de tratar de convertirse en los dueños del mundo. Es aterrador ver como enseñan a los niños a jugar con esos macabros juguetes y lo que se puede pensar es en como serán los niños que jueguen con esos juguetes.
Los norteamericanos como que se sienten muy orgullosos de repartir su “justicia” por el mundo y lo más seguro es que dentro de poco las compañías de juguetes norteamericanas ofertaran muñecos de los niños palestinos masacrados por los israelíes o los pedazos de seres humanos destrozados por las bombas en Irak.
Si los juguetes son herramientas esenciales para el buen desarrollo del niño y que juegan un papel importante en la formación de los conceptos, actitudes, expectativas y sociabilización en el niño entonces no es difícil de imaginar de donde sale tanto tarado y loco de la sociedad norteamericana. Recordemos los asesinos en serie o aquellos jóvenes que de pronto en los colegios empiezan a dispara contra sus compañeros.
Es preocupante ver como “la sociedad más poderosa del mundo” cada día que pasa se convierte en algo macabro y tenebroso.
¿Cómo serán sus líderes del futuro si cuando niños juegan con estos juguetes?
Bueno que se puede esperar de una sociedad que lanza a sus hijos a una guerra mal llamada “guerra contra el terrorismo” para justificar sus ansias de poder y de riquezas.
Siempre se ha dicho, hasta en canciones; que los jóvenes gringos son mayores de edad a los 21años pero ya a los 18 años pueden ir al servicio militar y en estos tiempos seguro que irán a uno de los conflictos sea el de Irak o el de Afganistán.
Lamentamos los que somos padres en lo que será el mundo en un futuro no muy lejano; que les tocará vivir a nuestros hijos; con todo lo que ahora se ve. El imperio se quito la careta y ya el cuento del país de la libertad y de la justicia es solamente una farsa. Con sus actuaciones últimamente en Irak y con el apoyo dado a sus perros de presa judíos demuestran lo que son y a lo que pueden llegar.
Quizás Hitler y los nazis sean solo unos niños de pecho en comparación con lo que poco a poco se ha convertido el imperio norteamericano.
¿ A donde llegaremos?
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