Nos acercamos a la toma de posesión del nuevo inquilino de la Casa Blanca, el Presidente electo Joe Biden, del partido demócrata, quien será el nuevo gobernante estadounidense por los próximos cuatro años (20 de enero del 2021 hasta el 20 enero del 2025)…y que desde el punto de vista político – burocrático, es la persona que tiene la enorme responsabilidad de ejercer de manera formal, el poder ejecutivo de la superpoderosa nación imperial, y que tiene en sus manos, la posibilidad cierta de poder cambiar algunos terribles aspectos de la nefasta política supremacista e injerencista, que aplicaba el presidente saliente y derrotado electoralmente, Donald Trump…en las que una de las lecturas postelectorales que se están analizando, es sobre algunas posibles causas por las cuales no logró la reelección…en la que hubo un claro mensaje de rechazo a como manejó "el gobernante saliente", asuntos muy sensibles para la población estadounidense, tales como: la pandemia, el desempleo, el racismo y su política exterior confrontacional contra otras naciones…
Hay una premisa política imperial, que se afirma y se confirma desde hace mucho tiempo en los EE.UU: el verdadero poder lo tiene la elite industrial – financiera – militar, que se materializa en el pentágono…y que sus presidentes son la fachada formal de la estructura gubernamental, que está a la orden de esos grandes poderes…por lo tanto, hay grandes expectativas sobre cual será el camino que seguirá Joe Biden, en el supuesto intento de demostrar que su gobierno será totalmente diferente a la de su antecesor…
Con respecto a cual será el tratamiento que Joe Biden tendrá con respecto a Venezuela…existen las naturales expectativas sobre las posibles respuestas a una serie de interrogantes que están flotando en el ambiente político: ¿seguirá con los criminales bloqueos en contra de Venezuela?...¿suspenderá las ilegales medidas coercitivas?...¿ mantendrá el apoyo político al autoproclamado presidente interino o reconocerá al gobierno de Nicolás Maduro?...¿se reanudarán las relaciones diplomáticas?...¿se regresará a un diálogo constructivo y respetuoso?...
Debemos esperar para saber si el imperio cambia su política exterior…no podemos ser ni optimistas, ni pesimistas…