Después de leer las reflexiones de Fidel en relación al incidente que se suscitó en la Cumbre Iberoamericana, es fácil entender el camino, para muchos no dejarán de ser palabras sin sentido, palabras vacías, para otros (en los que me incluyo) las reflexiones de un hombre que hoy mantiene la vigencia de lo que significa ser revolucionario, son palabras cortas y con un alto sentido de dignidad, que la historia de los imperialismos no perdona.
Escuchar el discurso de nuestro Comandante en Jefe, fue aleccionador, la manera de cómo debemos entender e interpretar la Historia en momentos en que la Revolución Bolivariana se siente amenazada por el imperialismo. Historia que por demás, es cierta, un imperio (español) que nos saqueo durante muchos años, hoy ese imperio nos sataniza. ¡Dejamos de ser colonia!
Las palabras pronunciadas por nuestro Presidente hay que referirlas en el contexto ideológico del ideal bolivariano, desenmascaró el carácter fascista de un gobierno europeo, que bajo la premisa del totalitarismo monárquico, hundió en la sumisión a nuestros pueblos en el pasado. Hoy pretenden hacer lo mismo sin éxito.
Al margen del irrespeto del que fue víctima nuestro Presidente por el tal rey (rey que sólo no existe en las fábulas y cuentos de hadas que siempre nos han vendido) está el hecho cierto de que la Revolución Bolivariana es autónoma e independiente, una Revolución que no tolera las agresiones, vengan de donde vengan, una Revolución que está impregnada de dignidad, de ideas, de conceptos, de humildad, de amor, que no tolerará ninguna ingerencia de ningún gobierno, sea del norte, o de Europa. Una Revolución que ha reivindicado nuestra identidad nacional y la antepone ante cualquier intento por socavar los principios que en ella está inmersa. El sábado nuevamente, muchos nos sentimos orgullosos de ser venezolanos bajo la representatividad de nuestro Presidente.
El mundo ha sido testigo presencial de uno de los momentos más trascendentales de la gallardía de América latina, de la irreverencia de pueblos que les han dicho a los modelos económicos que han pretendido imponernos, NO LOS QUEREMOS, sus fórmulas atentan en contra de nuestra dignidad, ya no seguiremos permitiendo que nos SAQUEEN, hemos despertado al mundo con una visión política más humana, que permitirá lograr nuestra integración y avance en lo económico y social. América Latina es hoy un bastión de resistencia anti-imperialista, que lucha por la inclusión y contra toda influencia a las imposiciones. ¡Pobres de aquellos gobiernos títeres que hoy complacen la arrogancia y la prepotencia de quienes los subyugan! gobiernos que pierden legitimidad ante la Historia. Es necesario entender que nuestro Presidente no dijo nada que no se suscribe a la verdad, los calificativos expresados por nuestro Presidente no son cercanos al desprecio con que este tal Aznar se expresa de los venezolanos y en contra de nuestra dignidad.
La batalla por la independencia en el siglo XXI ha de librarse hoy en el campo de las ideas, el valor con que entendamos nuestras convicciones político-ideológicas deberán garantizarnos la victoria No luchamos por el reconocimiento personal ¡ luchamos por el bien de nuestros pueblos!
Es probable que los detractores del proceso revolucionario venezolano, tanto en Venezuela como en América Latina, levantarán su voz de protesta por la ofrenda hecha de parte del zambo venezolano a la majestad imperial, en claro acto de sumisión y traición a la Historia. Pondrán de manifiesto la bizarra conceptualidad de obediencia y respeto a quien por años nos han irrespetado y explotado.
El día sábado los herederos de la sangre guerrera de nuestros Próceres y Libertadores deben haber sentido, con las palabras de nuestro Presidente, el cruce de copas de Bolívar, Martí y Sandino entre otros, desde el más allá. Fidel seguro exclamó: el fruto de mi vida tiene un cauce cierto ¡viva Chávez!
Patria, Socialismo o Muerte…
Venceremos
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