Una de las propagandas más difundidas por los agentes del imperialismo a través de sus medios de comunicación, es que el régimen de Hugo Chávez es una dictadura, que los venezolanos la estamos pasando muy mal y, por lo tanto, se hace necesario la intervención internacional para restituir la “democracia” que durante los gobiernos de Betancourt, Leoni, CAP 1 y 2, Caldera 1 y 2 y Velásquez, en los cuales, en nuestro país reinó la “abundancia y la felicidad”, según ellos. Recientemente, pude conversar con un amigo que residía en Miami, desde hace unos 12 años, precisamente los años que tiene de vida su pequeño y único hijo, me comentó que decidió regresar a Venezuela, vendió sus propiedades y con ello adquirió una vivienda cerca de Caracas, indagándole sobre las causas de su decisión, éste me manifestó que lo hacía por el bien de su hijo, “la droga amigo, en Miami, corre como el aire que respiramos y, no quiero un hijo drogadicto”, tajante la respuesta y muy buena su justificación. Pero hay más, me replicó, “la vida en el norte es muy aburrida y se parece tanto a un cuartel”, ¿cómo es eso?, le repliqué, explícame: “pues imagínate, un día haciendo una parrillada en el patio de mi casa, parece que el humo molestó a un vecino, quien llamó a la policía, de inmediato un agente policial tocó a mi puerta y me alertó sobre las sanciones que me tocarían si no tomaba las medidas para mitigar el humo, de manera que no molestaran a mi vecino y, a la vez, me recordó que a las 6:00 pm debía dar por terminado la festividad”. Tanto orden al parecer no se compagina con la jocosidad latina.
“Pero hay más, amigo, imagínate que si se te ocurre tomarte unas cervecitas en la puerta de tu casa, corres el riesgo de que te metan a prisión y te multen, si te sorprenden en flagrancia”, se imaginan los compatriotas de los barrios, tan acostumbrados a tomarse sus cervecitas los fines de semana y, estos señores de la oposición vienen a hablarles de dictadura en Venezuela.
“El colmo de los colmos, amigo, lo constituye la grama del jardín, si permites que crezca por encima de los 6 centímetros, te sancionan con trabajo comunitario, tienes que podar la grama a todo el vecindario”, y este s el reino de la “felicidad”, o el American Way of Live, perdónenme mi inglés chimbo, que nos prometen alcanzar, si la oposición de nuevo vuelve a gobernar la patria de Bolívar. Ah y las casas deben ser pintadas del color definido por el Municipio, y si no lo haces prepárate para tu sanción, y tanto que critican el comunismo que quiere uniformar las cosas, o aquí al Gobierno Revolucionario con lo de los uniformes escolares.
Pienso y le propongo Ministro Izarra, que esta realidad debe ser del conocimiento de todos los venezolanos y venezolanas, ampliamente en todos los detalles. La vida del norteamericano medio se asemeja muy poco a la del clase media venezolano, en la que este régimen de libertades y facilidades materiales ha garantizado mediante programas como el Venemóvil, créditos hipotecarios, SRI y CDI, Pdval, las Misiones, entre muchas otras medidas concretas, que han incidido tajantemente en la mejora de la calidad de vida de los venezolanos, una realidad inocultable.
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