Este es el director del diario español “El Mundo”. Un tipo que aparece en un video siendo sodomizado con un aparato eléctrico por una africana (víctima de una cámara oculta que le grabó mientras mantenía sexo con una mujer llamada Exuperancia).
En el video (se encuentra alojado en Google de forma pública) y se ve a Pedro J. vestido con un corsé femenino con sujetador, mientras es sometido por la mujer que le acompaña y que lleva un dildo en la mano mientras el director chupa, como si le practicase una felación, para después ser penetrado por el mismo. Los responsables del material audiovisual, fueron llevados al tribunal y condenados en firme a penas de entre 2 y 4 años por violación al derecho de la intimidad de este bandido, pero nadie se mete con él. Qué justicia, coño. El tipo es tan pervertido que existe la seria presunción de que fue él mismo quien lo colocó en Google.
Un vil degenerado. Pero tiene mucha plata. El PP en su afán por hacerse en con el poder le montó el periódico “El Mundo” y como una perfecta perra ahora Pedro J. Ramírez se ha crecido y es uno de los palangristas más aliados del imperio norteamericano. El tipo tiene una sucursal de injurias en Miami, y está trabajando hombro a hombro con la SIP para procurar alentar toda una gran campaña de desprestigio contra Venezuela. Se ve perfectamente que el pajazo del el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco señalando de que hay indicios de la "cooperación" del Gobierno de Venezuela en la alianza de los grupos terroristas ETA y FARC, es una trampa armada por la poderosa prensa internacional, la oligarquía colombiana, todo bajo las órdenes del galgo mayor, el Departamento de Estado norteamericano. Pedro J. Ramírez habla de que ETA en Venezuela, con anuencia del gobierno del presidente Chávez pasó a entrenar guerrilleros de la FARC para atentar contra el presidente Uribe. ¡Pobrecito Uribe, la madre de todos los paramilitares de Colombia!
Pero el Pedro J. Ramírez, acostumbrado a chantajear como le ordena la madre gringa, por la plata, claro, amenaza a Zapatero que si no llama a su embajador en Caracas estará claudicando ante el terrorismo, que no condiciona la asistencia de España a la próxima cumbre Iberoamericana a una severa sanción contra Chávez estará hundiendo en la indignidad a la patria de los gachupines.
Este hideputa Pedro J. Ramírez fue director del desaparecido “Diario 16”, y ha saido objeto de numerosos procesos legales por injurias, falsedades y calumnias, llegando el 4 de Octubre de 1993 a ser condenado a una pena de privación de libertad y de inhabilitación para el ejercicio de la profesión periodística. Pero como en España quien manda es la plata, el que más chantajee y tenga el apoyo tanto del PP como del PSOE, todos los jueces tuvieron que meterse el rabo entre las piernas.
Realmente están desesperados con los grandes movimientos y éxitos de la política del Presidente Chávez: sus jugadas económicas con la creación de la ALBA, su ingreso en Mercosur, su apoyo para la conformación de la UNASUR, su enorme presencia revolucionaria en toda América Latina que tuvo una posición determinante en la reciente cumbre en México dentro del Grupo de Río. Con golpes mortales a la CIA dentro de la OEA y con su CDIH.
Simultáneamente a estas acusaciones del gachupín Eloy Velasco, salta el portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley, diciendo que está sumamente preocupado por el deterioro de la democracia y las violaciones de los derechos humanos en Venezuela […] Seguimos teniendo nuestras preocupaciones sobre la actividad de Venezuela en la región como un jugador no particularmente constructivo.” Este voraz agente imperialista, tiene los aguacates de decir que él no tiene “ni la más remota idea” de por qué Venezuela necesita comprar algunas de las armas Cuando EE UU tiene bases en Colombia también para proteger a Venezuela. ¡Qué bolantras! Añade el bandido cuyo país tiene el arsenal asesino más grande del planeta: “El equipamiento que Venezuela ha comprado no parece estar en línea con el actual clima de seguridad que hay en la región”, quien reiteró que Caracas “no tiene que temer nada de EE.UU.”, porque ha firmado un acuerdo de cooperación con Colombia para usar sus bases militares.
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