Este primero de mayo, como ya es costumbre el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció un ajuste del ingreso mensual para los empleados y trabajadores de la administración pública; el cual consiste en anclar a la tasa de cambio oficial los bonos de alimentación que equivaldrán 40 dólares y de guerra 20 divisas estadounidense. Asimismo, los sueldos y salarios quedan sujetos a las convenciones colectivas que deben firmarse, mientras tanto se mantiene en 130 BS los sueldos bases.
Ahora bien, en total en la práctica el aumento de las bonificaciones es del equivalente a poco más de 13 dólares al cambio oficial, PORQUE EL BONO DE GUERRA SE COBRÓ EN EL MES DE ABRIL POR UN MONTO DE 1100 Bs. Equivalente a poco más de 44.76 dólares y el cesta tiket por 45 BS. cumpliendo en parte una petición de los trabajadores venezolanos el anclar los bonos permite que la devaluación no disminuya el poder adquisitivo, aunque el sistema cambiario lleva varios meses en una relativa estabilidad pero los precios siguen su alza.
Por su parte, ni los pensionados ni jubilados gozan del beneficio del bono de alimentación, lo que es igual decir, seguirán percibiendo sus pensiones de 130 BS. Que no les alcanza para costear la comida ni hablar de medicinas. El Presidente, expresó que hay que resistir, pero ¿cómo se hace si no alcanza el pan?
Es cierto, que el país lleva una crisis multifactorial que nos afecta a todos en especial a los más vulnerables como por ejemplo los abuelos que necesitan, tratamientos médicos además de sus alimentos, vale recordar que nuestros adultos mayores le dieron años de trabajo al país y ahora se merecen ser bien atendidos. El aumento de los bonos anclados al cambio oficial solo ayudará un poco al trabajador activo.
¿Y el aumento de pensiones y jubilaciones para cuándo?
Una opción, interesante para ayudar a nuestros abuelos, mientras se continúa la recuperación del salario es: por el sistema "Patria", o por las pensiones dar bonos especiales de medicinas equivalentes a unos 50 dólares o algo parecido, para que puedan tener mejor calidad de vida, como lo establece el Artículo 80 de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela.
Algunos, economistas, sugieren la liberación o disminución del encaje legal a menos del 50% para estimular el crédito bancario, un mecanismo de financiamiento que muchos añoramos porque sencillamente era una opción para cubrir gastos mientras pasa la crisis o emergencias médicas.
