Al crecimiento y fortalecimiento de las fuerzas democráticas, progresistas y de izquierda en América Latina y el Caribe, como producto del socavamiento de los sistemas políticos de derechas tradicionales que han sembrado en la población la más intensa manifestación de las desigualdades sociales, la derecha y el imperialismo dan respuesta de diversas formas, entre otras, con la agresión sistemática del gobierno de Estados Unidos y sus aliados a Venezuela, con la manipulación de las llamadas “protestas pacíficas” para generar enfrentamientos violentos y una contraofensiva a los que intentan generar el golpe de estado.
Asimismo, la ultraderecha venezolana en conchupancia con sectores políticos extranjeros ha desatado una amplia campaña mediática instrumentada internacionalmente a través de poderosos emporios comunicacionales con la finalidad de hacerle ver al mundo que en Venezuela existe un “régimen represor” y que el causante de los caídos en los hechos de violencia que ha sacudido al país, es el mismo gobierno. Este guion, que ha sido utilizado por segunda vez en Venezuela sin éxito alguno, se ha aplicado a otros países y han derrocado gobiernos que no le sirven a los intereses de la potencias involucradas.
El accionar diario de los medios de comunicación de la derecha nacional e internacional, es un tema recurrente que se ha denunciado a través del Sistema Bolivariano de Comunicación e información SIBCI, que ha desmontado toda la manipulación mediática que pretenden malponer al gobierno como causante de la violencia. Grandes corporaciones desarrollan planes desestabilizantes siguiendo una agenda que involucra a factores de la derecha nacional e internacional. Grandes empresas mediáticas desafían día a día a la democracia y sus instituciones. Es éste, quizá, uno de los retos más grandes que tienen por delante los gobiernos progresistas: Internacionalizar la comunicación con el fin de hacerle contrapeso a esas corporaciones de información que en lugar de informar se dan a la tarea de envenenar a la opinión pública con mentiras manipuladas..
El gran esfuerzo que en este momento están haciendo los Cancilleres seleccionados de la Unión de Naciones Suramericanas, UNASUR, como mediadores para instaurar la paz en nuestro territorio es muy significativo y relevante y un conjunto de iniciativas integradoras han sido activadas, como la construcción de una política de defensa común, en la que se vincula la defensa al desarrollo y el sostenimiento de América Latina como una zona de paz. Al mismo tiempo, se registran avances en la construcción y consolidación de una nueva arquitectura económica basada en el intercambio comercial entre los países miembros del MERCOSUR, con el objetivo principal de fortalecer las alcancías económicas de los países miembros.
En tal sentido, Venezuela cuenta con una geopolítica bien estructurada y fundamentada en el criterio de la complementariedad, la cooperación, el respeto a la soberanía y la solidaridad entre las naciones progresistas del Continente.
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