Desde su articulo La Tormenta [1], lección ofrecida por Chávez, Rafael Ramírez intenta mostrarnos ─con mucha ambigüedad para quién escribe─, su desempeño y convicción como amigo personal y uno de sus mejores y más dedicados colaboradores. Defensor a carta cabal del ideal bolivariano y socialista del comandante Chávez. Indirectamente, desde el inconsciente, sorprende, estableciendo lineamientos y desacuerdos con la forma de conducción y decisiones políticas del gobierno de Nicolás Maduro. ¡Va decidiendo marcar distancia!

Como otros altos personajes aliados, compañeros, colaboradores de Chávez, con los días pone fin a su papel y responsabilidad en el gobierno de Nicolás Maduro, heredado por instrucciones de Chávez; claro, ¡pleno como la luna llena! Consiente del presente y futuro, con insospechadas, diversas y complejas situaciones, para el común de los venezolanos ─señalado por el propio Rafael Ramírez en su escrito─.

¿No entendió o no le gustó la decisión de Chávez?

Marca la pauta y se despide, no sin antes señalar, acusar, condenar, a Nicolás y su gobierno, ¿buscando defensores, indulgencia, apoyo en los detractores y enemigos de Chávez y su proyecto bolivariano?

¿Cómo entender a Rafael Ramírez, uno de los hombres públicos de mayor proximidad y confianza de Chávez?

Una cosa es no querer ni compartir la forma, formación académica, liderazgo y conducción de Nicolás Maduro y otra salir corriendo a acusarlo ante los enemigos eternos de Chávez y su proyecto libertario, emancipador. Salir corriendo a buscar abrigo y protección ante el jurado y non santo enemigo. Ante los detractores externos e internos de la Revolución Bolivariana.

¿Va entendiendo Rafael Ramírez la lección? ¿Qué le pasó?

Será otro chavista de abolengo, clase, categoría, distinción, catedrático, académico…, que al no estar Chávez, en desesperanza, se vio condenado por la oposición y sus amos y buscan en Nicolás el culpable de todos los males, como la oposición contra Chávez.

¿Cuáles fueron las responsabilidades de Rafael Ramírez durante el gobierno de Chávez? ¿En el gobierno de Nicolás Maduro? ¿Por qué, tratando de dar lecciones mal aprendidas, se presenta cual cordero?

Será un chavista de pacotilla que con la enfermedad y muerte de Chávez creyó, confiando más, en la extinción de la Revolución Bolivariana por la barbarie opositora e imaginando una Venezuela devastada, anexada…, envuelta en una prolongada guerra civil, prefirió ser parte de los saqueadores.

¿Dónde está parado Rafael Ramírez?

Como uno de los pocos, muy pocos tal vez, personajes de responsabilidad pública y política, amigo, ¿qué, cuál fue, la más significativa lección aprendida directamente de Chávez? ¿Por qué, como unos u otros chavistas, salé ha decirse autentico defensor del ideario bolivariano, chavista, mientras acusa a otro, a Nicolás? ¿Qué no explica, Rafael Ramírez, desde la lección impartida por Chávez?

Chávez, sin excusas, hasta en el cielo, se sumergió y enfrentó la tormenta. ¡No pidió clemencia, como creyente; ante la adversidad y los enemigos, siempre se encomendó al cristo redentor!

Señalado por su propia familia, ante el gobierno español, Rafael Ramírez huye por la tangente señalando al mal gobierno, la dictadura y la falta de garantías. ¿En alguna adversidad Chávez obtuvo garantías de sus enemigos? Manuel Rosales, Didalco Bolívar y Ramón Martínez, se auto exiliaron enfrentados a Chávez, regresaron en el gobierno de Nicolás, hoy viven y hacen vida política en libertad y con garantías.

Con Luisa Ortega en la Fiscalía General, Ramírez, fue señalado, acusado, con extremadamente abultado y publicitado expediente desde la AN opositora, en desacato constitucional, se defendió a viva y clara voz. Entonces no criticaba ni responsabilizaba al gobierno, era parte muy significativa de él. ¡Nada, ni rasguño, fue absuelto! ¡Ni siquiera procedió el juicio! Luisa no lo aceptó, ¿estaba preñada de buenas intenciones? Hoy sabemos que no, su interés, para esconder sus felonías, era llevarnos a una guerra civil.

¿Qué no explica Rafael Ramírez desde la lección impartida por Chávez?

Giordani, Navarro, Maduro y Rafael Ramírez, ahora vemos que fueron personajes de mayor estabilidad y permanencia en el gobierno de Chávez, ¿por qué a partir de la reunión en la Habana ─desde el escrito de Ramírez─ ante su gravedad, Chávez pidió confianza y respaldo a Nicolás Maduro? ¿Por qué Chávez no confió el destino de la Patria, ¡su patria querida!, en las brillantes y académicas mentes de Giordani, Navarro o Ramírez? ¿Por qué en Nicolás, humilde, sin titulo académico, ni honorifico? ¿Por qué en un simple chofer de autobús? ¿Qué sabia Chávez? ¿Qué no le gustaba, que Rafael Ramírez no cuenta en su mala lección de tormenta?

Será qué ante la proximidad de las incalculables dificultades visualizadas y la derrota total del proyecto bolivariano, nadie tuvo pantalones, cojones, para afrontar la adversidad y acuerdan la responsabilidad sobre Nicolás Maduro, como el que menos tenía que perder.

Rafael Ramírez junto con Nelson Merentes fueron las cabezas visibles del área económica en el primer año del gobierno de Nicolás Maduro, con un petróleo aún por los 90 dólares el barril. Un año después, como lo preveían los informes citados por Ramírez, a la caída de 70, 80% del precio del barril petrolero y el ingreso nacional, se sumaban las sanciones de Obama y Donald Trump contra el gobierno Venezolano que hacían imposible el sostenimiento de un modelo económico basado en tecnicismos meritocraticos. ¡Las decisiones políticas externas e internas contra Venezuela y la Constitución Bolivariana, requerían respuestas políticas!

¿Rafael Ramírez no entendió ni asumió ningunas de las lecciones de un amigo llamado Hugo Chávez?

[1] La Tormenta, Rafael Ramírez Carreño, 19/11/17 - www.aporrea.org/energia/a255413.html