La política es como un tablero de ajedrez, ofensiva y defensa de lado y lado, las piezas se mueve según la táctica que la estrategia implementada por los contrincante hallan concebido en busca del jaque que les dé la victoria, por eso vemos que en el campo de batalla van saliendo del juego piezas por error o por entrega de las partes que andan en busca de romper el cerco de defensa y así lograr su objetivo a la mayor prontitud.
Como se puede entender, frente al tablero de ajedrez contamos con dos partes que se presionan, que tratan de engañarse entre sí, para ver como se debilitan sus defensas y en un abrir y cerrar de parpados se logra ganar la partida.
Esta reflexión viene como anillo al dedo a la hora de hacer los análisis críticos o autocríticos del resultado electoral que obtuvimos los militantes del partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) acá en el Táchira; es decir que ello pasa por enterarnos que no estamos solos en el tablero político, que el otro existe, que está ahí, moviéndose como topos, haciendo su trabajo para contrarrestar la influencia que nosotros tenemos sobre nuestra militancia, para ello el otro se vale de argumentos falsos que en la mayoría de los casos influyen en el desgano de potenciales seguidores nuestros.
El contrincante, es decir el oponente sabe que los nuestros tienen en sus mentes muchos temores que la mediática ha logrado instalar a nivel del subconsciente: temores de ideas y cosas que preocupan y les hace dudar y hasta retroceder a muchos de los nuestros, por eso muchas veces escuchamos de algunos electores nuestros, que:-“para no meter la pata, mejor me quedo en casa”- La contra campaña de los otros, hace que gente nuestra atemorizada deje de salir a votar y mientras esto sucede los electores duros y blandos de la oposición se mueven casi espontáneamente en su totalidad, incluso creo que nosotros en algunos casos movilizamos sin percatarnos a muchos electores de la contra.
Mientras nosotros los revolucionarios hacemos y mostramos gestión de gobierno, el adversario contrarrevolucionario que se mueve en el mismo tablero político, insiste en que por ahí viene el comunismo, que si esto o aquello sobre la propiedad privada, es decir hace su política para atemorizar, asustar e intimidar a los nuestros, quienes pareciera que se olvidan que el proyecto revolucionario le ha traído bienestar y calidad de vida como nunca había sucedido en nuestra patria.
En fin, considero que mientras los otros, hace su política contrarrevolucionaria, nosotros hemos dejado de lado la política bien concebida, convirtiéndonos en burócratas que olvidando que si el pueblo no asume la política es en muchos de los casos por carecer de conocimiento, lo que conlleva que al no tener tal conocimiento, carece como es obvio de conciencia, y si no se tiene conciencia, pues seguirá siendo sujeto manipulable de las falacias bien orquestadas que la mediática que el adversario implementa sin descanso sombre el subconsciente del pueblo. Eh ahí una posible razón del resultado adverso del 26.de septiembre.
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(Delegado PSUV-Táchira)
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