Las interpelaciones en la AN. Si de algo debemos estar orgullos es de una Asamblea Nacional plural, donde las minorías opositoras están representadas, aún cuando se creen mayorías, cosa que ya hemos demostrado en columnas anteriores que es falso. Debemos además ratificar que nuestra AN está cumpliendo un papel contralor extraordinario ante la gestión del Poder Ejecutivo cuando interpela a sus Ministros, pero lo que no podemos apoyar de ninguna manera son la acciones violentas en el hemiciclo. El problema no es quien haya pegado primero, el asunto es quien provoca los incidentes, y éste ya es el segundo episodio de una permanente provocación de la oposición ante el Presidente de la AN Soto Rojas. Estoy convencido que el país en pleno repudió el episodio, y así debe ser. Aún cuando este tipo de cosas sucede frecuentemente en parlamentos del mundo, no por ello se puede justificar que diputados, representantes del pueblo, se agredan físicamente o verbalmente. La AN es un espacio de debate entre la pasión y la razón, donde la razón debe predominar. La violencia es el arma del que no tiene la razón, decimos frecuentemente, y definitivamente es así, en el caso acontecido el jueves en la AN, ninguno tuvo la razón, ni Henry Ventura, ni Alfonso Marquina, pero menos Sigala que facilitó el conflicto azuzando el hecho. Estoy totalmente seguro que estas escenas de violencia han sido provocadas con premeditación y alevosía, y además seguirán pasando ya que a la oposición le conviene el caos, ya que en el debate se diluyen. La directiva debe tomas sanciones ante estos hechos o se embochinchará la cosa. Por otra parte, ha sido extraordinaria la oportunidad para evaluar la gestión revolucionaria, pero los diputados de oposición, en lugar de argumentar con base en el contraste entre lo planificado y lo cumplido, se han remitido, en su mayoría, a reproducir discursos de odio y de señalamiento ciego de los problemas que ellos consideran prioritarios, sin permitirse reconocer aciertos que todo el país aprecia en el gobierno bolivariano. Por otra parte, los diputados revolucionarios se han limitado a defender, en su mayoría, absolutamente toda la gestión, incluso aquello que los mismos ministros han reconocido como errores o defectos de su ejercicio, sin hacer práctica alguna de la autocrítica convocada por el Presidente Chávez. La AN se ha convertido en un espacio de diálogo, sí, pero entre aquellos que aún no han formulado propuesta alguna para solucionar los problemas del país de manera seria. La oposición demagógicamente pide un aumento de sueldo, al mejor estilo del populismo neoliberal, proponiendo cosas que ellos en sus gobiernos no permitirían que se cumpliesen, y los diputados del proceso revolucionario al no reconocer errores no pueden formular propuestas para enmendarlas. Debemos avanzar, en las próximas sesiones, a discursos críticos y propositivos, de los dos bandos, y aún cuando estoy seguro que entre dos proyectos antagónicos no podrá haber conciliación alguna, seguro estaríamos, por lo menos, de lograr un discurso de altura, que no se remita a señalar miserias humanas, sino a señalar las propuestas para avanzar. En el caso de los ministros, en general las intervenciones han sido buenas, pero la pregunta para ellos es ¿de lo que plantearon en el plan operativo 2010, cuántas cosas cumplió, cuántas no y porqué? Sólo así sabremos si han sido eficientes y eficaces o no. El presidente Soto Rojas. Caso aparte me merece Soto Rojas, contra quien la oposición desde un inicio arremetió vulgarmente, llegando a señalar cosas nada dignas de repetir en este espacio, pero que atendían a la descalificación personal de un hombre que muy por el contrario ha demostrado tener la autoridad moral para mandar a callar a Alfredo Ramos o a Cilia Flores por igual, y enseñar a Robert Serra a cumplir con la disciplina que el mismo argumento tener.  Que falta hacia en la AN alguien que por su autoridad, desconcierta a la oposición, que ha intentado agredirlo ya un par de veces y ha encontrado la sapiencia para desmontarlos. Ojalá el resto de los diputados revolucionarios sigan el ejemplo de no caer en provocaciones. Apure. Creo que es un secreto a gritos el hecho de que el exgobernador Aguilarte no renuncia por razones de salud, aun cuando ese sea el argumento oficial o no descarta que pueda estar enfermo. Sabemos que ha sido por fuertes cuestionamiento a su gestión desde el mismo seno del PSUV, y eso es muy bueno, ya que se convierte en un precedente que advierte que no existen intocables en el poder, que la “dedocracia” muchas veces no funciona, y que la autocrítica si funciona, lo que se hizo es correcto para el futuro de la revolución en nuestro país, pero sería un terrible error realizar sólo el castigo político y permitir la impunidad. Éxitos a Carrizales. Núcleo Endógeno Francisco de Miranda. El pasado miércoles estuve en la presentación de 200 pequeñas empresas que promovidas por EMPREVEN, son ejemplo de autogestión y evidencia el desarrollo de una economía socialista ¡Excelente experiencia! Frase de la semana: "Apocarse es virtud, poder y humildad; dejarse apocar es vileza y delito", Quevedo. En RNV, nos volvemos a encontrar este lunes a las 8 a.m. en Memoria Ampliada (canal informativo) y el miércoles en Cara o Sello a las 8 p.m. (canal juvenil Activa).

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