De esta forma el debate quedó planteado y la dictadura venezolana decidió, como aporte al combate juvenil, trasmitirlo en cadena nacional; entre nuestros combatientes resaltaron, Andreina Tarazona, Robert Sierra, Libertad Velazco, Osly Hernández y Héctor Rodríguez; por la banca opositora, aunque el único discurso del día fue leído por Douglas Barrios, solo dos nombres fueron promocionados por los medios publicitarios de la oposición, estos fueron, Yon Goicochea (por cierto que está desaparecido de la política, lo ultimo que supe de él fue que cuando le dieron el medio millón de dólares por un fulano premio auspiciado por la USAID, el hombre se compró apartamento en Acapulco, se casó por todo lo alto y supongo que ahora esta por allá luchando por la independencia o mejor aun por la dependencia de México), y Stalin González, quien ahora es diputado a la actual Asamblea Nacional. 

Estos jóvenes de una manera muy inteligente se abstuvieron de hacer el ridículo en público y en consecuencia, una vez leído un discurso preparado por algún guionista de la extinta RCTV y la USAID, con la ayuda de una agencia publicitaria con oficinas en Caracas, se retiraron del hemiciclo para no tener que pasar por la vergüenza de que los vieran sin argumentos para discutir algo que no estuviera en el guión que les prepararon; esa generación boba dejó con la boca abierta al mundo entero que esperaba el intercambio de ideas y el intercambio de propuestas, esa generación boba nos demostró que lo mas inteligente que tenían para decir era no decir nada. 

Hoy la generación, no menos boba, de los viejos que prepararon a aquellos jóvenes (pero que no les dejaron tomar mucha ventaja en el juego político, porque no los creyeron capacitados ni preparados para representar a nadie y porque la maquinaria partidista no permitía, ni permite, que haya refrescamiento en los cuadros de su férrea estructura) están inmersos en un nuevo debate; esta vez se trata de la interpelación a los ministros del gabinete; una vez mas la dictadura venezolana abre sus espacios y les da la oportunidad de, en cadena nacional, mostrarlos al mundo en su esencia, para que digan a viva voz al mundo la “verdad” de su sufrimiento y desenmascaren al “regimen” que los oprime. 

Esta vez no pudieron tomar la decisión de retirarse sin hacer preguntas; esta vez no les quedó mas remedio que meterse en el combate, dar la cara y bombardear a los ministros con la mayor cantidad de preguntas posibles, con la intención de demostrarnos a todos los venezolanos (opositores y seguidores) y al mundo entero que estamos en manos de un grupo de inexpertos, idiotizados, borregos del comandante.  

Aprovechando tamaña oportunidad, los diputados opositores, quienes sin duda alguna tienen que ser lo más granado de la oposición venezolana, hurgaron en lo más profundo de sus cerebros buscando las preguntas apropiadas para la ocasión. 

Y ya los vimos, preguntas incoherentes y bobas, gritos histéricos sin sentido, risas nerviosas y ridículas, conversaciones de muchacho malcriado que no quiere escuchar al educador mientras este le explica, juegos con los celulares, mensaje ridículamente infantiles y fotos sobre los peinados de las damas enviados en vivo mientras en el foro de explicaban temas de profundo interés, chateo con las novias, queridas, hermanas, amigos…chuletas pasadas a través blackberrys por los asesores para tal o cual respuesta; en fin una gran sarta de boberías que, una vez mas, dejó con la boca abierta al mundo entero. (Tanto que la prensa internacional que ellos manejan mejor ni habla del asunto). 

Este escenario nos deja una profunda reflexión, no tiene nada, siguen siendo los mismos bobos que se acostumbraron desde niños a las boberías de sus padres, esa generación que embobó a medio mundo para poder robar, saquear vender, regalar y destruir a un país completo. 

¡Hay que tenerles cuidado!, porque con esa limitación de pensamiento solo tienen un camino para recuperar el poder, la guarimba y el golpe de estado. ¡Hay que tenerles cuidado!, con esa demostración de incapacidad filosófica e intelectual que nos están presentando, solo les queda un camino para recuperar el poder, la violencia. 

Sus asesores ya les advirtieron, es mejor que no pregunten mucho, es mejor que no los enfoque mucho la cámara, es mejor dejar la vaina así, porque si siguen hablando no hay futuro político y van a terminar todos de picnic, retratados tomando guarapo e papelón y haciendo un sancocho a leña en alguna orilla del río Guaire con Chávez, Daniel Ortega y todos los ministros, en el 2050 celebrando los enésimos años de Chávez al frente de la nación. 

Todos los vieron, seguidores y opositores, ¡todos!, no tienen nada que ofrecer y además con una inmadurez política y personal que impresiona, Todos los estamos viendo…entonces no los perdamos de vista que el único camino que tienen para volver es el de la violencia, así que Alerta, pueblo Alerta…que cual niños malcriados si no convencen con argumentos, seguirán buscando por el camino de la violencia. 

De hecho ya empezaron con el espectáculo de los niñitos en la OEA, defendiendo a los asesinos, ladrones y criminales; el pueblo debe hacer lo mismo, un grupo de jóvenes podría acostarse en un lado con la misma actitud para pedirle a Insulza que ayude a hacer justicia a las victimas de Posada Carriles, Italo del Valle Alliegro, Rómulo Betancourt, Raúl Leoni, Rafael caldera, Carlos Andrés Pérez…o mejor aun un grupo de jóvenes podrían apostarse en un lado a hacer parrilla, tomar refresco, escuchar música y con sendas pantallas poner videos sobre la biografía de cada uno de los personajes que esta gente quiere poner como mártires. 

Lo cierto es que sea cual sea el método que usemos, tenemos que estar en pie de lucha, no nos podemos quedar de brazos cruzados; esta generación boba no son mansos corderitos, son peligrosos, porque la violencia siempre será el arma de los que no tienen la razón. 

Los chamos de hace cuatro años no fueron tan bobos como para exponer sus neuronas en publico, los viejos de hoy le ganaron, las expusieron en todo su esplendor en cadena nacional, esta vez los viejos les ganaron a los chamos en la mayor demostración de bobería, inmadurez, e incapacidad intelectual.