La Fundación Hombrenuevo,
colectivo conformado por pacientes que fuimos atendidos en Cuba, gracias
al Convenio Integral de Salud Cuba Venezuela, nos ponemos al
frente y a la disposición de este mandato presidencial, que implica
la necesaria puesta en marcha de un esfuerzo inmenso para detener el
daño que el narcotráfico y el expendio de alcohol producen en nuestra
sociedad. El pueblo debe asumir esta tarea, es en socialismo donde
deben darse las respuestas, es la sociedad y su poder comunal quien
debe darse por aludido. Mas allá del esfuerzo que deben hacer todas
las instituciones que de forma aislada y sin recursos suficientes deben
hacer para conformar un sistema orgánico y capaz de brindar la ayuda
necesaria que tantas personas requieren, se debe entender el deber de
la sociedad que marcha con claridad hacia el socialismo para comprometerse
en una lucha que no será nada fácil.
La droga es un arma política
contra nuestra revolución, todas y todos los venezolanos sabemos y
conocemos como se mueve este mercado, vemos a diario a los jíbaros
envenenando a la juventud, nuestras calles se llenan de miserias al
tener a seres necesarios para esta gesta revolucionaria, mendigando
en los semáforos con sus malabares hediondos a desamor, a soledad,
al infierno detestable del consumo esclavizante. Todas y todos debemos
enterarnos de que se trata este Sistema Nacional de Tratamiento,
debe ser una construcción colectiva y llena de principios humanistas,
de amor hacia estos seres a quienes acostumbramos a abandonar dentro
de nuestra falta de comprensión, ellos no son los culpables: son las
victimas. El amor a la vida nueva, a la sociedad fraternal y humana,
es la necesaria fuerza con la que sabremos rescatarlos e incluirlos
de nuevo en el sueño de la nueva patria.
Toda familia que sufre por
uno de los suyos en consumo conoce de lo que hablamos, sabe del dolor
de un hijo, hermano o esposo que se pega a la droga, que se convierte
en esclavo y que termina robándose todos los enceres de nuestro hogar
para cambiarlos por una dosis de piedra o heroína, toda madre que sufra
con un miembro de su hogar que se gasta el salario en cerveza y luego
termina en consumo de otras drogas sabe de donde viene la violencia
que azota a nuestro país, de donde viene la delincuencia y la terrible
cuenta de muertes cada fin de semana: el alcohol y la droga son los
culpables. La exclusión, la falta de futuro, la ignorancia por deserción
educativa, el deseo de enriquecimiento rápido y los antivalores de
la sociedad de consumo que nos arremeten por los medios de publicidad
llevándonos a la búsqueda de placer como la única forma de ser felices,
en fin, la sociedad capitalista es la madre de los vicios que le rentan
enormes riquezas a las mentes perversas que solo piensan en su lucro.
Como promotor y luchador de
este Sistema Nacional de Tratamiento le escribo a todos los compañeros
revolucionarios, no basta ya con aquel sueño que nació de seres combativos
como el General Néstor Luis Reverol, la Coronela Eugenia Sader,
Jhonny Ramos, Rafael Sánchez de Fundaribas, los camaradas de negra
Hipólita o todas y todos los que han aportado sus esfuerzos hasta ahora,
llego la hora de asumir como sociedad el compromiso de enfrentar y demostrar
a las demás naciones de lo que es capaz la fuerza de un pueblo, por
eso, insisto, escribo a mi pueblo para que asuma que esta victoria depende
de que la asumamos entre todos. Que debemos ayudar a difundir los nuevos
conceptos que muy pronto estaremos haciendo llegar a nuestras comunas,
liceos, escuelas, barrios y campos.
Mi gratitud a Aporrea, Kaosenlared,
Noticias Bolivarianas y tantos otros medios alternativos que dieron
a la Fundación Hombrenuevo su apoyo en estos años de lucha,
hemos logrado una primera victoria muy importante, pero es apenas el
comienzo. Ahora es deber construir una respuesta entre todas y todos.
Se que se lograra, Venezuela comienza un camino más para demostrar
a la America y el mundo de lo que se es capaz en socialismo: El SNT,
Sistema Nacional de Tratamiento a las Adicciones
nace para imponer una respuesta que clama nuestra sociedad. Es un deber
de nuestro pueblo, los que ya sufren por este mal endémico de la sociedad
que estamos transformando y los que aun no sufren pero ven el dolor
del vecino, acercarse al SNT y construirlo en socialismo.
¡Venceremos!
brachoraul@gmail.com