En los últimos días se habla sobre una transacción netamente comercial a la que quieren darle perversa connotación, por tal razón he aquí la única y verdadera versión, basada en hechos y documentos públicos El señor Walid Makled quien en un momento difícil que tuvo el país y por lo cual no había como movilizar la carga para el reparto de alimentos, medicinas y demás productos de consumo masivo a diferentes partes del país, se le pidió prestara sus camiones para estos menesteres, y de buena gana acepto y así lo hizo, este señor colaboró con el gobierno que en esos momentos se las estaba viendo bien fea. Pasada la emergencia y después de algún tiempo se da la relación comercial entre Inversiones Makled, C.A. y Pequivén, ésta, como consecuencia de que Pequivén recupera su producción, mermada cono consecuencia del sabotaje petrolero de finales de 2.002 y comienzo de 2.003, por lo que Pequiven abre un plan de emergencia para completar su red de distribución de fertilizantes y hace un llamado público, otorgando en el año 2,004 20 licencias, con las cuales determina y considera llena la cadena de distribuidores de fertilizantes que consiste en 185 empresas entre grandes y pequeñas, las cuales considera suficiente para tener surtido eficientemente de fertilizantes el mercado nacional; de maneras que eso de que Inversiones Makled C.A. era el distribuidor exclusivo de fertilizantes de la Petroquímica no es cierto.
La relación Comercial entre Pequivén con la empresa Inversiones Makled, C.A. duró ocho meses (julio 2004 – marzo 2005) ya que el contrato fue rescindido por incumplimiento del contrato por parte del concesionario. En el lapso que duró el contrato I.M.C.A. distribuye solo un 12% de fertilizantes, entre ellos un 0,4% de la producción nacional de Urea. La empresa Petroquímica le facturó a I.M.C.A. en el transcurso de esos 8 meses la cantidad de 13 millones de bolívares, con un margen de ingreso para el distribuidor de 5%, lo que le representará para I.M.C.A. 650 mil bolívares de ganancia, además de lo percibido por concepto de pago del flete. En diciembre de 2.004 el presidente de Pequivén ordena conformar una comisión para investigar la empresa I.M.C.A. por presunto desvío de fertilizantes, y una parte del lote correspondiente a I.M.C.A. se encuentra en un galpón en Santa Elena de Uairen. Entonces se abre una investigación y se pasa a la Fiscalía Sexta del Ministerio Público del Segundo Circuito del la Circunscripción Judicial del Estado Bolívar con sede en Santa Elena de Uairen. A finales de febrero del año 2005, ya se había corroborado el incumplimiento del contrato por desvíos de fertilizantes, sacos de fertilizantes por debajo del peso establecido y por despacho del producto sin la debida autorización de Pequiven a zonas no permisada, demás de morosidad en los pagos de las obligaciones hacía Pequiven. Los primeros días de Marzo de 2.005 se le suspenden los despachos de fertilizantes y se interrumpe la relación comercial con I. M. C.A. en virtud de los resultados arrojados de dicha investigación. En el mismo mes de marzo de 2005 Pequiven trata de ejecutar la fianza que garantizaba dicho contrato con la empresa I.M.C.A., pero Pequiven es notificada mediante una comunicación enviada por la compañía Seguros La Previsora que dicha póliza estaba anulada. Se inician averiguaciones para corroborar la nulidad de la fianza y se determina que efectivamente fue anulada debido a que I.M.C.A. había revertido dicha fianza y dejando a Pequiven en el aire.
A partir de ese momento Pequiven comienza a realizar gestiones para obtener el pago adeudado por I. M. C.A. El 8 de noviembre de 2005, Pequiven hace la denuncia ante la Fiscalía General de la República sobre estas irregularidades. El Ministerio Público responde a Pequiven el día 25 de noviembre de 2005 que el caso fue remitido a la Fiscalía Décima Tercera de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo. A raíz de esta situación y por las presiones e investigaciones hechas por el Ministerio Público, I.M.C.A. el día 14 de febrero de 2007 paga la totalidad de la deuda adquirida con Pequivén. Ahora bien, que cada quien juzgue el caso por su condición, pues por más que se demuestre de que Pequiven actúo sin tapujo, habrá gente que seguirá opinado que eso no es así y no habrá nada que hacer para convencerlo; ya que no hay peor ciego que el que no quiere ver.
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