En los últimos días se ha agudizado el problema carcelario en
Venezuela y es importante señalar que una vez mas los factores revolucionarios
se excusan tras la figura del saboteo por parte de la oposición Venezolana, yo
diría que no es saboteo sino que estos oposicionistas apátridas solo aprovechan
la ineficiencia manifiesta por parte de los entes encargados de administrar
justicia y de desvirtuar la consigna gubernamental “ Dignificando el sistema
penitenciario” que no ha sido mas que una falacia, claro yo no escribo estas
líneas para echar culpas porque hay algunos sabios que dicen que la culpa no
existe, entonces se trata de
responsabilidades compartidas, ¿Por qué compartidas?, es sencillo, no podemos
olvidar cuarenta años de pseudo democracia, los cuales fueron una constante
destrucción de nuestro patrimonio moral, al enseñarnos la teoría del facilismo,
la corrupción y la sinverguenzura, así como tampoco podemos olvidar que durante
la vigencia del pacto de punto fijo no había tantos presos porque los mataban
con la excusa de la Ley de vagos y maleantes, por lo menos ahora se respeta la
vida, vida merecedora de muchas
comillas, ¿ porque? , porque no podemos negar que quienes son responsables de
la custodia y seguridad de los reclusos son también responsables de que existan
tantas armas dentro de estos sitios, pero de esto no escapa la necesidad de
empezar a promover políticas de prevención del delito, no solo al pueblo sino a
las instituciones en general, un ejemplo de ello es el Cuerpo de
Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas CICPC, que en días reciente escuche a varios
personeros del gobierno decir que había que eliminarlos, yo difiero de tal
afirmación porque no se trata de la institución sino de las personas, asumo que
este cuerpo es necesario para el combate del delito en Venezuela y me atrevo a
decir que lo que sucede allí pasa por un problema de improvisación constante
tal como se esta llevando la política nacional en los últimos momentos, los funcionarios del CICPC solo ganan salario
mínimo por arriesgar día a día su vida así como también los de la Guardia
Nacional, Cuerpos policiales y entonces la superioridad les exige que deben a
como de lugar garantizar las estadísticas de otra forma serán susceptibles de
sanciones hasta de tipo penal de no llevar a cabo dichas pretensiones, así pasa
con los encargados de administrar justicia , en el caso de los jueces, reciben
ordenes de la superioridad en cuanto a la calificación y tratamiento de los
presuntos delitos y sus opiniones y criterios deben pasar por debajo de la mesa
de lo contrario se quedan sin empleo y sustento para sus familias, acotando que
también deben ellos garantizar las estadísticas, con igual comportamiento deben
ajustarse al sistema los fiscales del Ministerio Publico, no vale para nada sus
criterios, son ellos titulares del ejercicio constante de la acusación, basado
en el mismo principio estadístico que tiene como finalidad arrojar números
satisfactorios a favor de una política que yo defino como la política del
efectismo y show mediático gobierno-oposición. Mientras todo esto sucede el
ciudadano abogado, Ministro del deporte,
encargado de la juventud del PSUV, docente universitario, Jefe de estado mayor
en asuntos de desastre para el estado Miranda, Héctor Rodríguez Castro, promueve un proyecto de ley del deporte solo
para reivindicar a nuestros atletas y garantizar cumplir a cabalidad sus deseos
de controlar a la dirigencia deportiva venezolana, obviando que el sector
deportivo es mas amplio y que además este proyecto es de suma importancia para
la transformación del país, ya que debe tratarse con urgencia una política
clara y sustentable de masificación de la actividad física , el deporte y la
recreación, acompañada con la incorporación a la nomina del Ministerio del
deporte de mas de 100 mil entrenadores para tales efectos y esto debe
garantizarse en el proyecto de ley, pero es bien sabido que el ministro
desconoce la política deportiva porque no solo es un asunto de juventud sino de
conocimiento y de experiencia y lamentablemente nuestro ministro no la tiene,
aunque debemos reconocer que esta preñado de buenas intenciones, pero no basta
con eso porque estamos hablando del futuro de nuestro país, que va mas allá de
un capricho para trascender en un compromiso con el pueblo, entonces que vamos
a hacer dentro de diez años si solo hoy se siguen pintando canchas y entregando
balones para justificar la ineficiencia y el desconocimiento, yo estoy seguro
que debemos reorientar la política nacional en beneficio del pueblo, quizás por
estas líneas corra con la suerte de algún veto, o alguna calificación no lo se,
confió en la buena fe del ministro y de las instituciones, y les pido que por
favor acepten las criticas porque yo soy parte del pueblo y como pueblo me
inquieta y me llena de ira tanta prepotencia y decidía, yo solo invito a la cordura
y a pensar un momento en el futuro de nuestros hijos, como logramos revertir
este flagelo que día a día invade a nuestro hogares porque ninguno de nosotros estamos exentos y
lejos de la responsabilidad, ya que por acción u omisión nos toca un granito de
responsabilidad en el combate de la delincuencia, por eso insisto no se trata
de represión ni menos de tratamiento al problema, se trata de prevención del
problema, actualmente, en la nomina del ministerio del deporte no hay
entrenadores contratados para la masificación deportiva y me atrevo a decir que en ninguno de los
estados , entonces como garantizamos que nuestro chamos puedan ocupar su mente
y su cuerpo en actividades extra escolar sino se garantiza la gratuidad, ya que
el sistema deportivo actual esta privatizado por clubes, y es la única vía para
la práctica deportiva, no estoy en contra de los clubes, estoy a favor de que
existan además de los clubes, otra forma de masificar el deporte por la vía
publica y que nuestro pueblo tenga acceso de forma sistemática y constante a la
practicas de actividades físicas ,
deportivas y recreativas, ahora bien , señor Ministro Héctor Rodríguez Castro ,
deponga las armas de la ignorancia de la política deportiva y siéntese unos
minutos a pensar en lo que le escribo, a ver si por lo menos llevo en estas líneas algo de
razón, no soy yo el que mas sabe de deporte en este país, es posible que no
tenga la moral para hacer las criticas, pero como venezolano, ex deportista y
padre le pido que reoriente su idea de solo reivindicar a un sector, que merece
todos los honores y todo el apoyo del pueblo venezolano como son nuestros
deportistas de las distintas selecciones nacionales, pero es necesario y
urgente disminuir al alto índice delictivo y esto se hace con políticas
concretas y sustentables en la normativa legal, no con show, vea lo que hoy
sucede, el que hoy se encuentra en una cárcel con un arma hasta de guerra,
quizás ayer fue a una piscina, una cancha, un campo de beisbol y quiso
practicar un deporte, pero se encontró con
un entrenador, que para poder llevar el sustento para su casa, debía cobrar una
mensualidad y como este muchacho no pudo
pagar para practicar un deporte, entonces su vida se sumergió en el ocio y
claudico y hoy esta enfrentado al sistema en una cárcel con un arma que solo
pregúntese usted como llego a sus manos.
(*)Abogado en ejercicio, ex atleta
miembro de la selección nacional de judo y lucha sambo, ex campeón panamericano
y dos veces campeón mundial de lucha sambo 2000 y 2001, venezolano y amante de
la patria de Bolívar y de todos nuestros indígenas y negros que lucharon por
nuestra libertad.
oscarhernandezjud@hotmail.com