El uso y abuso que los medios de la derecha hacen de la libertad de expresión ha quedado evidenciada una vez más en las últimas acciones a través de caricaturas, montajes, artículos, declaraciones públicas y editoriales en los cuales se ofende a más no poder la dignidad de los personeros de los poderes públicos y de la Fuerza Armada, desde el Presidente de la República para abajo.
La gota que rebasó el vaso fue el fotomontaje publicado a todo color y casi a página entera en la portada de un pasquín como el llamado 6to. Poder dirigido por un delincuente con causas abiertas en un tribunal de Caracas y que sin ser periodista se atribuye tal profesión, lo cual de entrada debería ser repudiado por el CNP presidido por cierto por una mujer, que debería solidarizarse con sus congéneres que tan vilmente fueron agredidas al presentarlas y llamarlas cabareteras, pero además debería dejar claro que el agresor no es periodista a fin de que su rastrera actuación no salpique al gremio..
Pero no, éso es mucho pedirle a quien ha partidizado de tal manera un gremio, que por su doctrina y objetivos debería ser el más imparcial de todos, pero bien sabemos que no sólo el CNP sino todos los organismos que por cierto agrupan muy pocos profesionales, como también es el caso de la Federación Médica , entre otros, que están en manos de la derecha y a los cuales no les importa para nada la violación de las leyes que les atañen, pues colocan por encima de ellas los intereses personales o partidistas. Pensándolo bien es hasta mejor que un gremio tan desprestigiado como el CNP calle, pues una supuesta solidaridad sería más bien ofensiva para las dignas damas vilipendiadas y agredidas de manera tan baja por un delincuente y su medio escrito.
A estas alturas todas la organizaciones que agrupan las mujeres organizadas desde los consejos comunales hasta las madres de barrio, educadoras, mujeres profesionales en general, jóvenes féminas y hasta niñas deberían salir a la calle en una gran manifestación de repudio y en solidaridad con las agraviadas y aprovechar para declarar persona no grata, no solo a este “esperpento” de la incomunicación sino a todos quienes escudándose en falsos conceptos de la libertad de expresión llegan tan bajo como este desecho de hombre, que ordenó la publicación que hoy nos mantiene horrorizados a la gran mayoría de los venezolanos con conciencia.
¿QUÉ PASARÍA SI NO EXISTIESE TELESUR?
Una vez más TELESUR, rompe el sesgo de las grandes cadenas mediáticas, que informan sólo lo que el impero les permite sin importarles para nada que los hechos les hagan quedar como redomados mentirosos. Lo sucedido en Libia en las últimas horas viene a demostrar tal afirmación pues nada menos y nada más que desde el sitio de los acontecimientos este canal de nuestra América, muestra la otra cara de lo que sucede.
Ya es normal oír la frase: “¿Qué tal si no existiera TELESUR”?, así sucedió cuando las liberaciones unilaterales de los secuestrados de la FARC. Igual en los últimos acontecimientos en Europa y Chile, o cuando el golpe de Estado en Honduras. La verdad es que si queremos mostrar un ejemplo de profesionalismo y de respeto por los usuarios no hay que buscar más allá de TELESUR, este canal se ha convertido en el dolor de cabeza de la mediática imperial a la que no le importa engañar, igualito a lo que aquí sucede con los medios tarifados, traidores a su país por estar al servicio de una potencia extrajera y los medios públicos respetuosos que en nuestro propio terreno se encargan de decirnos la verdad.
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