Existen momentos de nuestras vidas en que luego de tanto luchar, de tanto batallar, nos da como ganas de soltar los guantes de tirar la toalla, y arrancar a correr a donde nadie nos pueda ver, para llorar de impotencia o de la impotencia que produce, el observar como tus derechos son mancillados y vulnerados por servidores públicos y que nos aboquemos a poner la queja, el reclamo y nadie nos ofrezca un gramito, de testosteronas sudadas, pero como en este proceso político de cambios profundos, que muy bien hemos denominado, Revolución Bolivariana y Socialismo del Siglo XXI, nos hemos comprometidos una gran cantidad de personas que les tememos al cuento del gallo pelón; voy a tan solo nombrar al creador de una frase muy ajustada a la ocasión sin llegar a plasmar el texto de la cita su autor es Bertolt Bretch y su contenido se lo dejo como tarea, al señor chofer del METROBUS, que me ofendió, tan solo por reclamar un derecho. ¿Oíste Haiman El Trudi? Tan solo por defender un derecho ¿te imaginas si reclamo sin razón? Na´guebona.
Para la elaboración de este escrito y su ejecución me voy a basar en dos instrumentos legales vigentes, para no cometer la torpeza de criticar por criticar, sino fundamentar mis chismes administrativos, en leyes sociales promulgadas para defender los derechos de los ciudadanos de nuestra patria, es decir, los derechos de los pobres guebones, que tenemos que soportar el abuso de unos señores servidores públicos, que se abrogan el derecho de humillar a los usuarios, en este caso, de los servicios del METRO DE CARACAS. Te cuento este cuento Haiman El Trudi; tan solo con la intención de que se tomen las medidas correspondientes, para que los servidores publico del SISTEMA DE TRANSPORTE METRO DE CARACAS o de cualquier otras latitudes, no abusen del poder que le otorga el estado.
Oye Haiman; el día de hoy tuve la desdicha de tener que ir al FUERTE TIUNA, utilizando los servicios públicos del Sistema Metro, como tal, y del servicio alterno del METROBUS, que en el caso que nos atañe presta su servicio hacia el FUERTE TIUNA. Te cuento hermano Haiman; del VALLE a FUERTE TIUNA, todo salió de maravillas, el servicio tranquilo y sin problemas; el problema comenzó, cuando venia hacia el VALLE nuevamente…Me monto en el METROBUS y le muestro mi ticket, al señor conductor, y este señor conductor; sin más explicaciones, que sus suposiciones, me decomisa ¡MI ticket! PRESUMIENDO, que mí ticket ya había sido utilizado por mi persona para viajar en el METROBUS.
Pero ese no es el problema HAIMAN, el problema radica en lo siguiente hermano:
Si existen unos aparaticos instalados en todos los METROBUS que sirven para determinar, que ticket ha sido utilizado, y cual no ¡ENTONCES! ¿Por qué no los utilizan? ¿Qué chanchullos hay detrás de esta situación de los aparticos dañados todo el tiempo? ¿Será alguna mafia? O ¿será a caso negligencia administrativa o incapacidad operacional?
Bueno camarada HAIMAN, lo muy cierto del caso hermano, es que el señor chofer del Metrobus marca VOLVO, con el numero 443, con las placas de circulación AF-4156 entre las 9:15 y 9:45 hora en que llegamos a la estación del Metro del Valle, ha tenido la osadía de calificarme de MUERTO DE HAMBRE, porque le reclamé la devolución de mi ticket que estaba nuevo, nuevecito, porque acostumbro a comprar mis ticket antes de salir de la estación del metro para no tener que hacer colas de regreso y el señor chofer, supuso que yo viajaba de gratis con un ticket, ya utilizado.
Otras preguntas HAIMAN: Si los coroticos o aparaticos esos que dan lecturas al ticket, para convalidar el viaje en el METROBUS están dañados ¡TODOS! En su gran mayoría (pleonasmo de chismografía) ¿Cómo es que estos señores choferes y choferesas, pueden determinar cuando un ticket esta utilizado y cuando no?
La otra cosa que no me cuadra, y esto ya si sería motivo de una investigación minuciosa, es la situación de la estación ALI PRIMERA, una cosa insólita sucede allá, y casi nadie se queja, AN RESULTA que en esa estación del metro, se cumple un principio mercantilista extraño, usted debe pagar para poder salir de la estación.
Pongámoslo de esta manera HAIMAN: Un sistema de transporte masivo público, me ofrece un servicio, en donde yo para poder bajar de la camioneta debo pagar a la entrada y luego debo pagar a la salida, o más dramático, imagínate HAIMAN, que uno deba pagar para salir de un cine luego de haber visto la película ¿tiene algún sentido ese sistema de comercio? Ah bueno, para el dueño del cine o de la camionetica de pasajeros sí; pero para el pueblo de a pie ¿Cuál es el beneficio? Solo para que lo investigues hermano HAIMAN
Creo que me pase de maraca, a lo mejor no tiene sentido y te debo los artículos de la Ley de Contraloría Social
CHAVEZ, es el camino, CHAVEZ es la razón
Sin CHAVEZ no habrá ¡Patria! ni revolución
cabacote@gmail.com