1830
25 de mayo: Bolívar llega a Turbaco.
26 de mayo: Bolívar le escribe al General Antonio José de Sucre, y en parte de la carta le dice: “Usted se complacerá al saber que desde Bogotá hasta aquí he recibido mil testimonios de parte de los pueblos”…“Yo me olvidaré de usted cuando los amantes de la gloria se olviden de Pichincha y Ayacucho”.
1° de julio: Recibe la noticia del asesinato del Mariscal Antonio José de Sucre.
2 de septiembre al 15 de septiembre: se pronuncian varias instituciones públicas e individualidades para que Bolívar se encargue de nuevo del Gobierno.
12 de octubre: El estado de salud de Bolívar es bastante precario y esto le obliga a detener su viaje en Turbaco.
8 de noviembre: Bolívar llega a Barranquilla.
23 de noviembre: Bolívar escribe al general Montilla: “Mis males van de mal en peor”
1 de diciembre: Bolívar llega a Santa Marta a bordo del bergantín Manuel.
6 de diciembre: Bolívar escribe al general Rafael Urdaneta, encargado de la Presidencia de la Gran Colombia.
6 de diciembre: Bolívar se instala en la finca San Pedro Alejandrino y le escribe una apasionada carta a Fanny Du Villars, una prima suya radicada en París.
10 de diciembre: Testamento y última Proclama del Libertador Simón Bolívar.
17 de diciembre: Muere
el Libertador Simón Bolívar a causa de una tuberculosis, en la Quinta
San Pedro Alejandrino, cerca de Santa Marta, Colombia, a
las 1:03 p.m.
Aquí termina
la sucinta historia que en recordación de los 181 años de la muerte
del Libertador Simón Bolívar me atreví a reseñar. La pretensión
que tuve y tengo todavía es que quien lea este modesto escrito se de
cuenta de los sacrificios de una persona que por tener un ideal y ser
fiel a él, dedicó su vida en cambiar las cosas y hacer Repúblicas
independientes; libre de dominios extranjeros. Además de que la revolución
que dirigió Bolívar lo llevó a viajar miles de kilómetros durante
buena parte de su vida, a caballos, en mulas, a pie y en barcos, para
presentar batallas a los usurpadores de estas tierras, después, constituir
y estabilizar gobiernos autónomos en estos países.
Si se quiere comparar lo realizado por el Libertador Simón Bolívar, en su solo 47 años de vida, como militar, estadista, tribuno, literato, estratega, magnanimidad, romanticismo y desprendimiento, esto último por ser él uno de los hombres con la más alta fortunas de aquel tiempo en Venezuela, lo expone toda en bien de un pueblo antes que disfrutarla personalmente, por lo no se puede comparar su ejecutoria con los aventureros que ha expuesto sus vidas a cambio de poseer riquezas. Simón Bolívar tiene que ser el orgullo y la fuerza espiritual de cada uno de los venezolanos de bien. Y a cada uno de estos venezolanos les toca defender su memoria antes cualquiera que quiera ofenderla, pues como el Libertador Simón Bolívar no ha habido otro hombre en el mundo, al menos en este Continente Americano. Es por ello que el grito del venezolano siempre tendrá que ser Viva Bolívar, Viva Venezuela, Viva la vida de todos aquellos quienes desean la paz, la justicia y el amor entre los hombres.
Diciembre de 2.011
joseameliach@hotmail.com