¿Quién seguirá tus pasos?
No tuve chance de conocerte personalmente, Zobeyda.
Sin embargo no deje de admirar tu trabajo, tu amor por los pequeños y pequeñas, siempre pensé que no dejaste de ser una niña…
Quise conocer tu Museo de Muñecas, pero no porque estuviera reconocido por la UNESCO, sino por el sencillo pero profundo mensaje que lleva impreso.
Me contaron en alguna oportunidad que la casita de bahareque, sede de la Casa de las Muñecas de Trapo, ubicada en Píritu - Portuguesa, forma parte de un bosque, y desde su jardín “se miran los luceros y se bochincha con la luna”.
También supe que poetas y cantautores se inspiraron en tu trabajo.
Uno de tus hijos, camarada muy apreciado, me dijo que ayer andabas muy alegre, conversando y recordando gente querida.
Ay! Zobeyda, que difícil va a ser que alguien ocupe el enorme espacio que dejas, me inquieta que perdamos gente bonita y sensible como tú, que aunque no te conociera, no era impedimento para soñar con ser carajita otra vez…
Llega en paz a donde tengas que llegar, y no olvides continuar sembrando muñecas, juegos y poemas…
Escuche aquí de Alí Primera, Zobeyda la Muñequera http://www.goear.com/listen.php?v=6839577
v2querales@hotmail.com