Una de las virtudes del Comandante Presidente Chávez, es su ética y su conciencia del deber social, razón suficiente para no fallarles nunca a los pobres y a la clase media. Esa simbiosis entre el Presidente y su Pueblo se comprobó por quinta vez, con esta alta votación lograda el 7 de octubre de 2012. Durante esta campaña electoral el Presidente Chávez reconoció la ineficiencia de algunos funcionarios. "Errores muchos, Ineficiencia, por ejemplo, burocratismo, falta de seguimiento a los proyectos que se aprueban" reflexionó durante la excelente entrevista con José Vicente Rangel, el 30 de septiembre, otros de nuestros ciudadanos ejemplares. Chávez se comprometió a realizar un seguimiento mayor a sus funcionarios para obtener mayor eficiencia de su administración pública.
Mi experiencia de trabajo en la administración pública, de doce años durante la Revolución Bolivariana, me ha demostrado que los funcionarios con mayor conciencia del deber social, y eficiencia en su trabajo, no son los que ocupan los cargos de responsabilidad. Eso desmotiva al resto de empleados y produce una crisis en la gestión pública. Ocasionando, el primer acto de corrupción de un funcionario público, que consiste en acostumbrarse a cobrar sin trabajar. Sin embargo, eso no ha sido impedimento para obtener grandes avances económicos, sociales y culturales en los 14 años de gobierno. Por esa razón, el presidente Chávez nunca ha perdido una elección presidencial.
Pero, el Presidente Chávez es consciente, que si un país no logra tener una administración pública eficiente, es imposible garantizarles a sus ciudadanos todos los derechos humanos, y se presentará en corto tiempo, un fracaso de gobernabilidad. En estudios realizados en países, incluso en Cuba, se ha demostrado que la falta de una supervisión estricta y la desmotivación, causa una gestión deficiente, ocasionando atraso en el bienestar social de la sociedad.
Un Ministro, Alcalde o Gobernador que no tenga una comunicación fluida y permanente, entre sus cuadros directivos, sus funcionarios y comunidades, demuestra un total desconocimiento de nuestros principios constitucionales, que indican que nuestra democracia es participativa y protagónica. Además, son objetivos fundamentales para una buena gerencia. Porque, si no hay comunicación, no habrá una buena organización, y sin ésta no existirá eficiencia en ninguna institución, ni siquiera en la familiar.
Las venezolanas y (os) tenemos la seguridad que el Presidente Chávez cumplirá pronto, con lo prometido en la entrevista arriba mencionada: “Como líder me encargaré de inyectarle más voluntad al proceso". Este servidor público, le sugiere al Presidente Chávez, la implementación de dos misiones urgentes. Una podría ser llamada Misión Conciencia Nacional para el estudio y promoción de nuestra Constitución, dentro de las instituciones del Estado y el Poder Popular. La segunda podría llamarse, Misión Eficiencia en la Gestión Pública, para lograr la capacitación integral de todos los funcionarios público. Estas imprescindibles misiones podrían ser dirigidas por el Consejo Federal de Gobierno, el Consejo de Estado y el Poder Ciudadano.