Algunos de los argumentos utilizados por dos analistas del mundo capitalista para explicar las “ganancias” de los grandes conglomerados financieros privados que controlan las economías y gobiernos del mundo pueden ayudarnos a comprender el alcance de la explotación financiera mundial y por qué bancos extranjeros que operan en Venezuela obtienen la mayor parte de sus ganancias en nuestro país
La estadounidense Ellen Brown y la alemana Margrit Kennedy1, al igual que otros estudiosos y movimientos sociales que se oponen al salvamento de entidades bancarias y a las medidas de austeridad adoptadas por los gobiernos de Europa y los EEUU, proponen una reestructuración profunda e integral de todo el sistema financiero.
En una nota publicada en la revista ADBUSTER (junio 2013), E Brown cita un estudio de M Kennedy para ilustrar el papel que juegan los intereses en la transferencia de la riqueza desde las manos de los ciudadanos a las manos de Wall Street. Kennedy ilustra con el caso alemán como entre un 35 y un 40% del dinero que pagan los ciudadanos alemanes por sus compras se va en intereses que son capitalizados por banqueros, financistas y tenedores de bonos nacionales y transnacionales. Los ricos se hacen cada vez más ricos a expensas de los pobres, no sólo por la codicia de Wall Street sino por las matemáticas inexorables de un sistema bancario privado que calcula y cobra intereses por prestar “n” veces un mismo capital que sólo existe contablemente.
La Dra. Kennedy destaca el asombro que causa en las personas descubrir que aunque no hayan tomada dinero prestado, no tengan tarjetas de crédito o las cancelen a tiempo, pagan permanentemente intereses por créditos que no han contraído. Ya que los productores, los proveedores, los mayoristas, los vendedores al detal y los demás integrantes de la cadena de producción dependen del crédito para cubrir sus gastos e incorporan los intereses que deben pagar a sus costos de producción y, en consecuencia, al precio que cobran al consumidor definitivo. Consumidor que, además de enriquecer por esa vía a los capos del sistema crediticio privado, también lo hace cuando paga con los impuestos los intereses correspondientes a las deudas contraídas por su gobierno.
Brown cierra el artículo concluyendo que análisis como el hecho por Kennedy contribuyen a explicar el crecimiento de los activos, intereses, deudas y “ganancias” del sector bancario en los EEUU, partiendo del 7% en 1980 hasta llegar al 40% en el 2006, año en que comenzaron a notarse los efectos de la crisis.
1 Ellen Brown: “Web of Debt” (La telaraña de la deuda) y Margrit Kennedy: “Occupy Money” ( Siguiendo el dinero o la toma de posesión del dinero )