Con Hugo Chávez Frías surgió una importante síntesis cualitativa en la lucha por la liberación nacional y el socialismo que reavivó, de una u otra forma, esas esperanzas de los pueblos de nuestra América por acceder a un tipo de sociedad mejor, esperanzas que fueran largamente aletargadas y reprimidas por las clases dominantes en función de sus mezquinos intereses, en correspondencia con los del imperialismo gringo. Gracias a Chávez, los amplios sectores populares de Venezuela pudieron superar esa resistencia contumaz que durante décadas le fuera inducida sistemáticamente (siguiendo los esquemas propagandísticos diseñados por Washington) por quienes usufructuaran el poder, haciéndoles ver lo maligno que resultaría para sus vidas una revolución en el país, máxime si ésta adoptaba el ideario socialista o comunista.
Todo ello cambió drásticamente con la insurgencia del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200) que comandara Chávez el 4 de febrero de 1992, dando al traste con la imagen interesadamente creada por las clases dominantes que presentaba a Venezuela como beneficiaria de uno de los sistemas democráticos más estables en la parte sur del continente americano (junto con Colombia), a pesar de las agudas contradicciones padecidas por la sociedad venezolana. Es así que, tras el declive e implosión del bloque soviético, la opción representada por Chávez no sólo motivó a los sectores populares venezolanos a creer en que sus anhelos de redención social finalmente se convertirían en una realidad, sino que la misma obligó a muchos revolucionarios a redefinir y a replantearse lo que sería entonces la construcción colectiva del socialismo revolucionario, pero con la adición del pensamiento político del Libertador Simón Bolívar, el Maestro Simón Bolívar y el General del Pueblo Soberano Ezequiel Zamora, sin desconocer lo propio de otros ideólogos y luchadores revolucionarios del mundo que contribuyeron a su ampliación, difusión y enriquecimiento.
De esta manera, Hugo Chávez vino a encarnar una síntesis cualitativa teórico-práctico del socialismo revolucionario, a tal grado que su ejemplo y palabras trascendieron las fronteras nacionales, convirtiéndose desde entonces en un importante referente para las otras naciones de nuestra América que continúan combatiendo a diario por sacudirse la hegemonía del capitalismo y la expoliación del imperialismo. En este contexto, el accionar revolucionario de Chávez tiene un alto significado para explicarnos los acontecimientos que siguen sacudiendo la realidad actual del continente. Su comprensión -sobre todo, de orden ideológico- podría ser ese punto de partida necesario para lograr la profundización de todos aquellos cambios sociales, políticos, culturales y económicos, creándose las bases de un nuevo modelo de sociedad, esta vez bajo los ideales del socialismo revolucionario.-
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