Mi hermana Marucha, siempre me llama y me pregunta preocupada para que yo le “informe” sobre la situación del país, en especial cuando aparecen las oleadas de rumores, referente al advenimiento de un golpe de estado y que recorren el país como una onda expansiva, sin conocerse el sitio donde se origina, o tal vez si. Mi temerosa hermana, asume que siendo yo trabajador del estado venezolano y un sempiterno “escribidor y opinador” del acontecer político nacional, tengo acceso a fuentes informativas o de “inteligencia”, cuando en verdad soy un mundano “escribidor y opinador. Pero, al final con mis explicaciones la calmo, pero siempre manteniendo la necesaria cautela, hasta que me vuelva a llamar.
Pero no hay que ser un acucioso investigador o formar parte de una elite que pesquisa estos lúgubres ambientes desestabilizadores, ya que desde el inicio del Gobierno Revolucionario estos escenarios siempre han estado presentes y no solo promovidos por la pérfida derecha nacional e internacional, sino por los que subrepticiamente o hasta de manera no tan candida, están dentro de las instancias del poder político y gubernamental del proceso. Y estos últimos, son tan o mas peligrosos que la misma derecha visualizada, porque estos si manejan información y trafican con ella, compartiéndola con los enemigos de la patria.
No es de extrañar, que con las disposiciones adoptadas por el Camarada Presidente Maduro y el Gobierno Revolucionario, en materia del manejo financiero, burocratismo, combate a la corrupción, la seguridad alimentaria, el romper el cerco inflacionario y especulador, el contrabando, narcotráfico y que estas medidas empiezan a crear y conformar un clima de confianza y de animo en la psiquis del pueblo, las huestes apátridas emprendan sus tácticas al rodar las “bolas” desestabilizadoras, con “informaciones que me dijo un militar amigo de un amigo, esposo de una amiga, cercano aun general o un a almirante, que trabaja en tal o cual ministerio” donde se le advierte al pueblo que tienen que comprar comida por bultos, adquirir galones de agua y sobre todo “mantenerse asustados” y transmitir estos recelos. Y como “prueba de que todo esto es verdad” aumentan el “valor” de este miserable rumor, diciendo que el Presidente Nicolás no viajo a la ONU, porque si lo hacía le daban el golpe y que al quedarse, este queda “pendiente”. Es decir, quieren que la catalepsia emocional con que a diario someten al pueblo, se mantenga a través de todos los medios, sembrando la cizaña en forma alevosa. Y estos medios puede ser el informal y escurridizo rumor o todo el andamiaje de los “formales” privados: la prensa, radio y televisión, financiados por las empresas del estado y entes del gobierno nacional.
El siempre presente Camarada Comandante Chávez, fue un crítico acérrimo de nuestra aparato informativo, porque a pesar de la inversión en recursos, tecnología y la formación sociopolítica de nuestros informadores y opinadores, la divulgación de los logros de la Revolución era (y aun se da) opacada por la andanada de la metralla desinformativa y patrañera, de los fablistanes al servicio de la derecha conspirativa. Nuestro pueblo y hay que reconocerlo, aun se engancha en masa con las telenovelas, los concursos de belleza, los alienantes noticieros y programas de “información” y cualquier bodrio, que les crea una realidad antagónica, es decir, creada en base a mentiras o escenarios supuestos tan elaborados que pasan como creíbles y lo peor del caso, el estado financia esto (creo que esto ya lo dije). Y nuestra radio, nuestra prensa, nuestra televisión no puede con esto porque la ven, la leen y la oyen “aburrida” en vez de ser el heraldo de la información veraz y oficial. Estamos jodidos.
En una entrevista realizada a Marta Harnecker en el Programa "Visión Nacional", en AM 870, Radio Nacional Argentina, el domingo 16 de septiembre de 2013, entre otras cosas manifestó con respecto al golpe de estado al Camarada Presidente Allende “La amenaza de golpe estaba diariamente presente. Al comienzo toda la izquierda tomaba medidas para enfrentarlo, pero ocurrió como el cuento de Pedrito y el lobo, de tanto anunciar que venía el lobo, y no llegaba, cuando el lobo llegó no estaba preparado para enfrentar. Eso ocurrió con los dirigentes de la izquierda. Muchos de ellos, en ese momento estaban durmiendo en sus casas” Y esta experiencia en el austral Chile, no solo debe quedar para realizar un estudio académico histórico, sino apreciarla como una latente y tangible situación en nuestra patria.
Es verdad que el pueblo Chavista salió a la calle para rescatar la dignidad democrática y al líder de la resistencia y del gobierno popular en abril del 2002. Muchos decían que era lago inédito, si lo era, pero también era un pueblo menos golpeado y con un mar de esperanzas reivindicativas puestas en su líder, en su gobierno y vio que los que daban el golpe, eran los que oprimieron y masacraron a ese mismo pueblo durante décadas. Actualmente, los que andan en las aventuras conspirativas son los mismos del golpe de estado del 2002 y nos preguntamos: ¿ese mismo pueblo, como irá a reaccionar ahora?
Sin Chávez no hay Revolución, porqué Chávez es la Revolución. Y está Revolución es Chavista, porque todos somos Chávez.