Perdone usted a su vez mi intromisión en un asunto para el cual no he sido llamado, pero las fallas que yo modestamente le veo a la propuesta del "bolívar-divisa" son básicamente dos: la revaluación, con lo cual el gobierno dejaría de percibir, no es necesario decirlo, cuantiosos y sustanciales recursos. Esto implicaría, como es fácil entender, dejar de cumplir enormes e inaplazables compromisos. Lo que no podría hacerse sin que se viera sensiblemente afectada la calidad de vida de densos sectores de nuestra colectividad. especialmente dentro del ámbito laboral y de las misiones. Es decir, que uno de los argumentos con el cual se trata de justificar la adopción del nuevo bolívar como es el de preservar la calidad de vida de la población, paradógicamente quedaria hecho añicos automáticamente. Y eso sin tomar en cuenta que el gobierno, al reducir sus aportes a los sectores señalados, estaría creando las condiciones para una explosión social si no igual al del 27 y 28 de Febrero, por lo menos muy parecida.
Por otra parte, el gobierno, al recortar los mencionados aportes, estaría afectando, como ya dijimos, de manera sensible, la calidad de vida de densos sectores de la población. Con lo cual no estaría haciendo nada distinto, aunque por otras vías, lo que un eventual gobierno neo-liberal haría de manera más expedita. De allí la necesidad de buscarle una solución global, integral, holística, si se quiere, al conjunto de problemas que aquejan a nuestro pais, que no es sólo la cuestión monetaria, como una visión demasiado unilateral y estrecha pretende hacernos creer, sino que son muchos y, para colmo, estrechamente interrelacionados entre sí, lo cual dificulta enormemente la solución de los mismos por separado.
Por ejemplo, ¿se tiene acaso una ligera idea de los gigantescos recursos que el gobierno tiene que desembolsar mensualmente para mantener en pie unas empresas que, como las de Guayana, están totalmente quebradas; que lo que producen, junto con el aluminio y el hierro son incalculables pérdidas? Y Corpoelec, qué decir de esta empresa. Nada, que como las anteriores está también en la misma situación, al extremo de que el propio Rodríguez Araque afirmó en sendas entrevistas por VTV que la empresa que presidía apenas estaba recaudando el 52 por ciento de la nómina. Y más recientemente, el propio Jesse Chacón afirmó que la recaudación por el servicio que presta Corpoelec apenas obtiene el 25 por ciento de sus gastos operativos. Pero hay más, según una información que acabamos de leer el total de personas que están siendo beneficiadas por la misión "Amor Mayor" con pensiones equivalentes al salario mínimo, es un poco superior a los dos millones entre venezolanos y extranjeros.
Ahora bien, todas estas empresas deficitarias, todas las erogaciones por concepto de pensiones y jubilaciones están siendo subsidiadas por el gobierno nacional. Lo que nos hace preguntar: ¿que sucedería si debido a una revaluación del bolívar el gobierno dejara de percibir los recursos con los cuales hacer frente a estos compromisos que irresponsablemente se han echado sobre los hombro de la nación. Y no es que estemos de acuerdo con la aberrante práctica de las devaluaciones. Lo que reclamamos es que a esta situación cada vez más insostenible, se le debe buscar y pronto una solución . Porque, ¿de qué valdría solucionar el complejo problema del control de cambio, la paridad de la moneda, el mercado negro del dólar, etc., si se dejan intactas estas situaciones que constituyen, sin exageración, una peligrosa bomba de tiempo? A tal efecto, propondríamos que el gobierno convoque a los mejores talentos del país, a los mejor preparados ética y académicamente para ver de qué manera podríamos salir de este enrevesado laberínto.
Lo otro es que los demás países que comercian con Venezuela acepten que les paguen sus acreencias en los nuevos bolívares.
En Maracaibo no tenemos agua. Siete años sin ella y no hay quien escuche este clamor del pueblo.
