UN ANTECEDENTE INMEDIATO
Está por realizarse el primer Congreso Ordinario del PSUV este año 2.014 con el propósito de “revisar, rectificar y reimpulsar las bases teóricas del partido” para enrumbarnos hacia la construcción del Socialismo Bolivariano de este siglo XXI. Para el logro de este objetivo se han designado tres equipos de trabajo sobre la base de un plan que debe arrancar en abril del 2.014. Para el III Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela están circulando:
- Reglamento Interno. III Congreso del PSUV
- Documento Fundamental de la Comisión Ideológica y Programática
- Documento Fundamental de la Comisión de Políticas y Alianzas Internacionales
- Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela
- Plan de la Patria
- Libro Rojo
- Libro Azul
- Golpe de Timón
- Unidad, Lucha, Batalla y Victoria
- Líneas Estratégicas de Acción Política
- Agenda Bolivariana Alternativa (una de las versiones)
- 12 Líneas Estratégicas de la Nueva Fase de Gobierno del Presidente Nicolás Maduro
Este Congreso no partirá de cero, púes existe una elaboración teórica, conceptual y política expresada en la Revolución Bolivariana, el legado histórico del Comandante Chávez, un acumulado popular de experiencia volcada a la creación del nuevo Estado que plantea el texto Constitucional: El Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia y un Pueblo que permitió la transición pacífica, luego de la sensible desaparición física del Presidente en ejercicio Hugo Chávez, eligiendo como nuevo Presidente a Nicolás Maduro.
Una vez más, ante la pretensión estratégica del Imperialismo Yanqui, cuyo propósito es desestabilizar a Venezuela y derrocar al Gobierno Bolivariano; saldremos victoriosos del llamado golpe suave, guarimbero y su estrategia con etapas de ablandamiento, deslegitimación, calentamiento de calle, combinación de formas de lucha y de intento de fractura institucional, copiando la experiencia de otros países donde no existen vanguardias populares revolucionarias que expresen legítimamente a su pueblo y que resuman o comprendan la esencia de la confrontación Imperio-Nación, Imperio-Humanidad y la contradicción Capital-Trabajo que rige al mundo de hoy.
Es oportuno señalar y recordar que el primer Congreso Ideológico del PSUV se llevó a cabo entre el mes de noviembre del año 2.009 y el 24 de abril de 2.010. En el mismo se aprobaron: La Declaración de Principios, Los Estatutos del Partido y Las Bases Programáticas estableciendo allí con claridad los principios, los valores, deberes y derechos del militante para luchar por: “la tarea central de la Revolución Bolivariana que es desmontar el poder constituido al servicio de la burguesía y el imperialismo y refundar un poder radicalmente distinto, al servicio del pueblo venezolano y los demás pueblos del mundo, es decir, la construcción del poder popular y revolucionario. Todas las tareas políticas están dirigidas a su consolidación como la única garantía de la victoria definitiva de la Revolución Bolivariana”.
Esto no es poca cosa y ello supone que como militantes debemos tener, en lo fundamental, una compresión científica del momento político actual; manejar la coyuntura en sus rasgos esenciales en lo ideológico-político y una precisión del periodo histórico que vive la humanidad, en la lucha contra el capitalismo y su expresión máxima en el Imperialismo Yanqui junto a sus aliados locales y regionales. Esto en un mundo complejo y a la vez maravilloso e histórico por lo que está pasando en Venezuela, la Región y el Mundo, en el cual se proyecta como lucha global y prolongada, cuyo desenlace final será la construcción del socialismo, si logramos enfrentar, detener y derrotar la locura de una guerra termonuclear en la cual estaría en peligro la propia existencia de la humanidad. Este siglo XXI, es el siglo más difícil, complejo y exigente de estos tiempos que le tocado atravesar a la humanidad.
UN RECUENTO PARA LA COMPRENSION DE LA TRANSICION DEL CAPITALISMO AL SOCIALISMO
Hemos estudiado la historia y el desarrollo del hombre y la mujer sobre el planeta Tierra. Según investigaciones científicas, la humanidad podrìa tener unos 100.000 años, desde el descubrimiento del instrumento de trabajo y en su desarrollo y avance en el conocimiento de la naturaleza. Pero en los últimos 6 ó 7 mil años se produjo una perversión histórica, producto del excedente en la producción. Una minoría comenzó a apropiarse de la riqueza que producía el proceso social de trabajo realizado por todas y todos; acumularon poder en algunas comunidades y para justificar la apropiación indebida, inventaron la propiedad privada y el Estado como mecanismo ideológico de dominación, con sus respectivas fuerzas armadas, policías y jueces para imponerse sobre las grandes mayorías. Asimismo, surgió el trabajo esclavizado a través de diversos modos de producción como el esclavismo (4.000 años), el feudalismo (1.000 años) y el capitalismo cuyos primeros síntomas aparecieron en los siglos XII y XIII en la Europa occidental. Fue a partir del siglo XV cuando se consolidaron los capitalismos nacionales y surgió la conformación de nuevos Estados nacionales con la doctrina del mercantilismo, dándose a la par los procesos de invasión, conquista y colonización europea hacia otros continentes.
En Venezuela el mercantilismo y la lógica del capital arribaron por Macuro, en agosto de 1.498 embarcados en las carabelas de Cristóbal Colon. A partir de ese momento, perdimos nuestra libertad y nació la resistencia aborigen y la lucha por la soberanía nacional que no ha concluido aun.
Hicimos heroicos esfuerzos durante tres siglos hasta llegar a la Guerra de Independencia cuando el precursor Francisco de Miranda y el Libertador Simón Bolívar, sistematizaron el proyecto liberador de Estado y sociedad como alternativa frente al imperio español, para lograr la independencia política. Luego lo volvimos a intentar con la construcción de la Gran Colombia, pero no fue posible por circunstancias históricas adversas; ya que la iniciativa la tenían los mantuanos, los terratenientes y comerciantes apoyados por el capitalismo europeo y yanqui. En La Guerra Federal aspiramos retomar la república perdida en 1.830; pero una vez más, la traición interna funcionó cuando asesinaron al líder, Ezequiel Zamora, un 10 de enero de 1.860 para caer nuevamente bajo el control y la dependencia foránea.
En el siglo XX nos impusieron el modelo minero-petrolero con el Gomecismo y el Puntofijismo. Aunque siguió existiendo la resistencia popular, ella se mantuvo con limitaciones y dificultades de diverso signo sin lograr alcanzar el poder. Mientras tanto, la lucha de clases se agudizó en el mundo y en particular en Europa entre el capital y el trabajo y entre las naciones y los pueblos.
En el transcurso de los siglos XIX y XX se dio la concentración del capital con los monopolios y surgió la categoría imperialismo que nos condujo a la primera y segunda guerras mundiales, pero también los trabajadores se organizaron en sindicatos y partidos de carácter proletario, superando la concepción del socialismo utópico. En Londres en 1.847 y 1.848 se reunió una vanguardia de obreros con la presencia de Marx y Engels; a quienes se les encomendó que sistematizaran una plataforma común de lucha para combatir coherentemente. Fue así que vio luz el célebre Manifiesto que le da sentido histórico a las aspiraciones de los pueblos. Con el programa popular rumbo al socialismo científico, se planteó la necesidad de definir la plataforma de lucha concreta frente a cada coyuntura en particular y precisar las medidas revolucionarias de gobierno en cada momento especifico, en función de la acumulación popular de poder para avanzar en el camino de la revolución y definir la consigna universal “proletarios de todos los países uníos”. Con los sucesos de la Comuna de Paris en 1.871 y la Revolución Rusa con Lenin y Trosky al frente en 1.917 aprendimos que la revolución socialista era posible en lo concreto real.
En Venezuela el movimiento perseverò con la bandera histórica de la liberación enarbolada por Pio Tamayo, quien dio los primeros aportes señalando el rumbo del socialismo. Fue él, quien planteó la necesidad de organizar el partido revolucionario, dejándonos un testamento en “Carta a un Amigo”, documento en el cual sostenía que, el socialismo tenía que ser construido por los socialistas con “la libertad, la ciencia, el arte y la poesía”. Lamentablemente seguimos el camino del empirismo y el dogmatismo quedando pendiente retomar el llamado de Pìo Tamayo en las circunstancias actuales.
A lo largo del siglo XX se hicieron esfuerzos en diversas coyunturas: Gomecismo1.908-1.935; transición López Contreras, Medina Angarita 1.936-1.945; dictaduras de Delgado Chalbaud, Pérez Jiménez 1.948-1.958 y el Puntofijismo 1.958-1.998. Se construyeron saldos políticos concretos con muchos sacrificios y heroísmos, pero las limitaciones teóricas, políticas e ideológicas expresadas en el eurocentrismo, el reformismo, el anarquismo y la ausencia de balances colectivos para hacer las autocriticas y rectificaciones condujo a la derrota de esa vanguardia por ausencia de una estrategia de poder popular coherente.
En 1.989 ocurrió el Caracazo que no fue más que el rechazo de este pueblo a las medidas económicas aplicadas por el neoliberalismo. A partir de esta fecha se inició una larga coyuntura política de transición, en la cual se agudizó la lucha de clases en el país y comenzò el derrumbe del Puntofijismo. El acontecimiento del 4 de Febrero de 1.992 cambiaría sustancialmente el panorama político de Venezuela con la rebelión liderada por el Comandante Chávez y un grupo de militares patriotas. A partir de allí marchamos como pueblo a la toma de Miraflores con la lucha política y de masas expresada en las elecciones del 6 de diciembre de 1.998.
Desde entonces hemos desarrollado la lucha, bajo un mando único interno logrando acumular fuerzas en conjunto con los pueblos y gobiernos de la región latinoamericana y caribeña para favorecer la creación de un mundo multipolar con nuevas organizaciones internacionales y con mayor nivel de independencia como son: el Mercosur, la Unasur, la Alba y más recientemente la CELAC, en cuyo encuentro nuestro país participó activamente en La Habana, el pasado mes de enero del 2.014 a favor de la Declaración de la región como Zona de Paz y la profundización de la integración regional y promoviendo la incorporación de Puerto Rico al organismo en franco ataque al colonialismo.
IMPORTANCIA DEL CONGRESO DEL PSUV
Marchamos hacia la realización del congreso ordinario del PSUV, es una oportunidad histórica; pues es hora de hacer el balance político necesario y definir una línea política justa, clara y coherente en sintonía con nuestro pueblo, delineando el camino a seguir en medio de esta lucha de clases en un mundo que sigue siendo complejo, difícil y exigente pero esperanzado ante la transición histórica del capitalismo al socialismo que lleva poco más de siglo y medio. Aquí, en la tierra de Bolívar se han establecido bases de resistencia firme, contra el imperialismo y el capitalismo depredador. Con el Programa de la Patria como estrategia global enfrentaremos y derrotaremos como pueblo combatiente por la independencia, la soberanía y la libertad a este enemigo histórico de la humanidad.
Aspiramos que este Congreso ayude sustancialmente a despejar incógnitas, fortalecer las alianzas de clase en el marco de la democracia participativa, social y protagónica, abrir brechas que fortalezcan la unidad y el mando único para marchar de victoria en victoria en esta transición, hasta lograr construir la sociedad de productores libres.
UNAS PALABRAS FINALES
Mucho camino y luchas se han escenificado desde aquellos tiempos en que Pio Tamayo estando detenido en el Castillo de Puerto Cabello, allá por el año 1.927 fundara la Carpa Roja, una escuela de formación político-ideológica en la cual planteó la formación de un partido revolucionario y una dirección estratégica.
Falta un largo camino por recorrer aún, pero debemos con el análisis objetivo de la coyuntura y el compromiso del cuadro político impulsar la construcción del socialismo como transición del capitalismo al comunismo. Según Mao Tse Tung, el comunismo es la ideología completa del proletariado; y a la vez, un nuevo sistema social, es el futuro infinito, bello y luminoso de la perspectiva de la humanidad. Los ideólogos de la burguesía han satanizado el termino comunista y han sembrado el miedo en amplios sectores populares para enmarañar la lógica explotadora del capital a través de la mercancía y otros elementos, superando las contradicciones de la lucha de clases y entendiendo que las formas de producción capitalista aún permanecerán modelando el sistema económico por un tiempo hasta su agotamiento histórico.