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Se acabó CADIVI. Pasó a la historia, como el tristemente recordado RECADI. Hubo, según los datos aportados por voceros del Gobierno, una pérdida cercana a los 30 millones de dólares. No es poca cosa, como dice Pérez Pirela. El Presidente Maduro ordenó abrir unas investigaciones acerca de la estafa. E inclusive ofreció que se conocería la lista de los responsables. Pero a estas alturas, cuando ya no existe Cadivi, como medio de adquisición de divisas, no se sabe nada. Se habla mucho de que no debe existir impunidad, desde las esferas del gobierno. Se habla también de justicia. ¿Y entonces? ¿En qué quedamos? Por qué los peces gordos andan tranquilos y ocultos, sin que la justicia llegue a ellos. ¿Por qué? ¿Acaso tienen coronillas? ¡Se cansa uno!
2. Los sabrosos helados Coppelia
¡Qué helados tan buenos! Es marca cubana. A Chávez lo enamoraron en 2012. Cayó. Le metieron un tigre en el tanque. Aflojó un dineral para la planta. ¿Dónde? En Falcón. Vino la inauguración. Aló, Presidente se engalanó. Fue en Miraflores. Chávez los probó. Los ministros saborearon. Las ministras también. Hubo chanzas sabor a fresa. Pero el tiempo descubrió la falsa. Al Presidente le metieron una cabra. A los pocos días la planta paró. Destituyeron al gerente. Después vino el silencio. Silencio prolongado. Silencio total. Se había despilfarrado un chorro de real. Se vuelve hablar sobre el tema a la calladita. Ahora sí. El nuevo presidente ofrece villas y castillas. Coppelia cubrirá de sabor la geografía nacional. Esa planta se convirtió en una chupa dólares. Terminan de inyectarle 12.1 millones de bolívares. ¿Qué pasará? ¿Será que un día el pueblo venezolano podrá disfrutar de los famosos helados Coppelia? La película continúa.
3. ¿Y las arepas socialistas?
Otro caso para Replay. ¿Se acuerdan de las areperas socialistas? ¿Qué pasó con estos establecimientos? Hay voces que dicen que eso se acabó. Que fue un sueño que tuvo el Comandante Chávez. Uno de los Osorio micrófono en mano inauguró algunas areperas. Más fue la bulla que la cabuya. Ya no se habla de eso. ¿Y los reales que se invirtieron? ¿Quién es el responsable directo de este desagüe? Aquí nunca hay culpables. ¡Se cansa uno!
4. Se hizo justicia en la CVG
Recientemente se firmó el Contrato Colectivo entre los representantes de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) y el sindicato. El General Carlos Osorio, aún Presidente de la CVG, cumplió al permitir la discusión del contrato con fluidez y su firma antes del Primero de Mayo. Fue como una especie de “regalo” para los empleados y trabajadores de esa empresa estatal. Todo el mundo quedó satisfecho. Pero en especial los pensionados y jubilados. Tendremos el mismo aumento a la firma del contrato. Pero lo más significativo es el bono alimenticio, o cesta ticket que será de 2.500 bolívares, en un inicio. Con la posibilidad cierta de pasar a 3.500 en los próximos meses. Y habrá más. Gracias por la receptividad del General Carlos Osorio y su equipo gerencial de Recursos Humanos. ¡Volveré!
Puerto Ordaz, 5 de mayo de 2014
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