1. Osho dijo: Es mejor cometer errores y aprender de ellos, que hacerle caso a alguien y no cometer errores. Pero entonces nunca vas a aprender nada. Y también se preguntó: ¿Por qué la nueva generación es más inteligente. La inteligencia trae problemas. Y es natural que la nueva generación sea más inteligente. Así es como sucede la evolución. Cada nueva generación será más inteligente que la presente. Tus hijos serán más inteligentes que tú, y los hijos de tus hijos serán más inteligentes que tus hijos. Eso está bien. Pero sucede que hay veces los padres tienen que demostrar que son más inteligentes o tanto como sus hijos. ¿Cómo se expresa eso? Veamos: ahora mismo, más de un centenar de jóvenes estudiantes, la mayoría de la clase media alta, están demostrando que no son tan inteligentes. Se han dejado lavar el cerebro por unos adultos que sí saben manipular y engañar a estos muchachos, y los ponen de carne de cañón en una acción vandálica, destructiva y criminal que no conduce a nada bueno. Allí la inteligencia de estos jóvenes está fallando. Y es cuando debe surgir, entonces, la acción orientadora del padre y de la madre. Para tratar de rescatarlos a tiempo del camino torcido que han cogido, como respuesta a la manipulación y al engaño, de quienes sí saben lo que quieren. Ojo, mucho ojo, padres y madres.
2. Tú hijo es un tesoro ¡cuídalo!
El dinero se cuida. Se guarda. No se despilfarra. Los bienes materiales también son objeto de cuido, de mantenimiento, de preservación. Un hijo es más que toda la suma de estos bienes. Pero hoy día hay muchas preocupaciones. Los padres se preocupan por el dinero para el sustento. Y quienes son ricos, se preocupan por acumular más dinero. Más apartamentos. Más carros. Más cuentas bancarias en dólares o euros. Más negocios. Se vive en una eterna preocupación. ¿Y los hijos? ¿Qué sabe usted de su hijo, de su hija? ¿Dónde están en este momento? ¿Qué hacen? ¿Con quién salen hasta altas horas de la noche? La respuestas a estas interrogantes demuestran que a los hijos, a ese inmenso tesoro, se tienen en un segundo o tercer plano. Podríamos hablar que se han abandonado a su suerte. Por favor, padre, madre, ocúpense de sus hijos. Todavía están a tiempo de rescatarlos del mal camino que le han pautado un Leopoldo López, una María Machado, o un dinosaurio como Antonio Ledezma, para no hablar de un agazapado como Henrique Capriles.
3. ¿Amas a tus hijos? ¡Demuéstralo!
Usted, madre, padre, me dirá: nosotros le damos carros, motos, chequera, tarjeta de crédito, y todo lo que necesiten para que sean hombres y mujeres ilustrados y de bien para nuestro hogar, nuestro país y la humanidad, si alcanzare. Le pagamos sus estudios en los mejores colegios y universidades de Venezuela y el mundo. ¿Qué más podemos hacer? Caray, se han olvidado de lo más importante. Lo fundamental, en una buena orientación a los jóvenes. No le han dado la verdadera dosis de amor que necesitan. Son unos huérfanos de amor. No le han inculcado los verdaderos valores. No le han hecho amar a sus semejantes. A amar a su Patria. A respetar los símbolos patrios. A respetar a nuestros libertadores. Esos héroes y heroínas que lo dieron todo por darnos la libertad. No completa, como es lógico. Pero nos enseñaron el camino para ser libres, soberanos y hombres y mujeres de bien para la Patria. ¿Qué otra cosa puedes hacer por ellos? Enséñales a reír. Jueguen con ellos. Salgan a divertirse con ellos. En estas u otras acciones hay amor. Amor del bueno. Y así los alejan del mal. De las terapias a temprana edad. De las malas influencias. Enséñales a respetar a los mayores. A los ancianos y ancianas. A los maestros y profesores. A las autoridades. Antes, en mi época, se respetaba al hermano o hermana mayor. Se respetaba a los tíos y tías. A las madrinas, a los vecinos. Y, como es lógico, se respetaba al grado máximo a los padres. ¡Por favor, dadles amor a tus hijos!
4. Un verdadero estudiante no es un criminal
En todas las épocas, y en todo el mundo, o casi todo, los estudiantes han sido vanguardia en la rebeldía y la protesta. Un muchacho o muchacha, demuestra su rebeldía en su hogar, contra los padres. Esa rebeldía se expresa en el liceo, en el colegio, y sobre todo en la Universidad. En Venezuela, el estudiante, el verdadero estudiante, protestaba en mi época, por el pasaje estudiantil, por los cupos, por una mejor alimentación en los comedores, y hasta por una mejor educación, o por el cambio de algún profesor que se consideraba un pirata. El estudiante venezolano se caracterizó hasta hace un poco más de dos décadas, por ser de pensamiento vanguardista. Abogaban por gobiernos de izquierda, o nacionalistas. Pero, de un día para otro las cosas cambiaron, por lo menos en la Universidad Central de Venezuela, campeona, en un ayer, de luchas por la libertad, por la soberanía, por las causas justas y sociales. Hoy día, por lo menos en la UCV, la mayoría de los estudiantes se han alineado con la derecha y con los poderosos. ¿Cómo comparar a la Rectora actual de la UCV, con el Rector que fue Jesús María Bianco? La diferencia es de aquí a Pekin. Pero aún así, los estudiantes venezolanos, sean de liceos o de las universidades, son rebeldes, pero no asesinos.
5. Los asesinos son otros
Está demostrado, que en la guarimba que lleva más de tres meses, en plan desestabilizador y golpista, donde se ha destruido bienes de servicio públicos. Se han quemado módulos de asistencia médica. Se han incendiado universidades. Se han colocado guayas degolladoras. Se han talado más de 5 mil árboles. Se han provocado la muerte a más de 42 personas, entre civiles, militares y policías. Se han incendiados gandolas cargadas de comida. Se ha atentado contra Mercales, Pdvales y Abastos Bicentenarios, etcétera. Esos hechos han sido liderados por mercenarios contratados y bien pagados, así como a delincuentes. En estos actos han sido arrastrados algunos estudiantes, por engaño, por ignorancia. Pero, reitero, los estudiantes venezolanos son rebeldes, pero no asesinos. ¡Padres, madres, asuman su rol de tales! ¡Cuiden a sus hijos! ¡Volveré!