¿Cómo está reconociendo el patrono la inobjetable contribución que hacen sus trabajadores en el acrecentamiento del patrimonio de aquel? [1]
Se nos ha vendido la falaz idea de que los patronos cargan las prestaciones sociales contempladas en la “ley del trabajo”[2], mismas cuyo reconocimiento por parte del patrono ha sido producto de largas y cruentas luchas obrero- patronales desde hace más de 1 siglo.
La renuencia patronal para reconocer tales prestaciones, la mezquindad de su monto, la fecha de pago, etc., han terminado asimilándose a una carga para el patrimonio del capitalista contratante; nada más falso.
Es que, de la misma manera que el consumidor final termina pagando los salarios porque estos reaparecen en el precio de venta de las mercancías llevadas al mercado, asimismo, las prestaciones sociales las pagan los consumidores porque ellas son simples cargos por el mismo concepto de mano de obra.
Estas prestaciones bien podrían ser reconocidas y pagadas conjuntamente con la paga semanal o quincenal, pero su condicionamiento legal lo impide. Efectivamente, las prestaciones aparecen y son honradas a partir de cierto número años de labor impecable por parte del trabajador.
Sin embargo, debemos preguntarnos: Si los compradores de las mercancías finales son quienes pagan esas prestaciones, ¿por qué a los patronos no se les obliga a contribuir con ellas?, ya que las ganancias que terminan recibiendo, derivadas del trabajo de los asalariados, bien podrían ser pechadas para tal fin.
Por ahora, todos los conceptos de salario recibidos por el trabajador se les devuelven contra este cuando reaparezca como consumidor. El capitalista los asimila a costes y, como tales, los traslada al precio de venta.
La idea es : ¿cómo está reconociendo el patrono la inobjetable contribución que hacen sus trabajadores en el acrecentamiento del patrimonio de aquel?
[1] No hablemos de explotación del asalariado por su patrono, ni de plusvalía alguna; hablemos de que el patrono se ha mostrado como un tremendo mal agradecido.
[2] Ley del Trabajo, de los Trabajadores y de las Trabajadoras.
