Cuando la sorpresa llega trajeada de muerte más que sorprender, indigna.
Ayer me llegó un twitter de Nicolás maduro que rezaba así: @ nicolasmaduro: Honor y Gloria a nuestro Mayor del Ejército Bolivariano Raúl Bracho asesinado en la batalla contra el contrabando. Asombrado pare el carro a un lado para volver a releerlo. Ver el nombre de uno en algo tan serio como un twuit de nuestro presidente obrero Nicolás, hace ya que se entienda como una información seria. Muy rápido dije, -carajo, había otro Raúl Bracho y nos lo mataron- continué mi rumbo con un dolor atravesado en el pecho, me dirigí de regreso a casa y pude entrever noticias sobre el asesinato de un mayor de nuestro ejército que luchando contra el contrabando, había sido asesinado, con la peor de las casualidades de usar ambos el mismo nombre. Quienes de mis conocidos leyeron la noticia, solo me informaron para compartir el dolor más que la sorpresa. Un combatiente chavista había caído por las balas de los saqueadores de nuestra patria.
Esta mañana leí un escrito que me pegó muy duro en el alma, era la carta de un amigo de Raúl el Mayor asesinado, claro, empecé leyendo pensando que se refería a mí que publico a diario en Aporrea y a las pocas líneas supe que era el Raúl Bracho caído en lucha, no yo.
Raúl Bracho no eres el colofón, escrito por su amigo Carlos Contreras.
http://www.aporrea.org/actualidad/a193758.html
Quizá no es común lo que me ha sucedido, un ser humano con mi mismo nombre y además chavista como yo, ofrendó su vida por nuestra revolución, esa similitud de nombres pega en la barriga, se los juro. Yo no podré estar el día siguiente de mi muerte, ni podré leer si alguien me escribe algo, pero si pude estar el día después de tu partida y de tu entrega tocayo. Pude leer esta historia breve de tu vida que escribiera tu hermano de la vida, tu pana, Carlos Contreras. Se me mojaron los ojos tanto como húmedas de llanto de amor y rabia están sus dignas y merecidas palabras.
¿Qué puedo hacer por ti? ¿Cómo rendirte honores?
Pues sé que tú mismo me estarías respondiendo desde allá, al lado de Chávez, que siga la lucha por la revolución bolivariana cada día que me quede de vida, y a eso vine Raúl, a prometerlo en tu nombre que es el mismo mío, que Hugo Chávez Frías tendrá en el Raúl que pasó a la historia de los héroes caídos en batalla y el que está aquí escribiendo, a dos soldados, uno que ya cumplió hasta entregar su vida y yo, que trataré de hacerlo siguiendo tu ejemplo.
Honor y Gloria para ti, camarada Raúl Bracho.
Los que mueren por la vida, no pueden llamarse muertos.
Seguiremos y venceremos.