El terrorismo tienen múltiples facetas, se manifiesta abiertamente con saldos cruentos por violentos, quienes lo propician y financian también lo son, quienes callan ante los desmanes de sus ejecutores también lo son.
Aquí hemos vivido estas manifestaciones en todas sus características y más, últimamente cuando las autoridades han revelado pruebas audiovisuales de uno de los principales actores de hechos terribles que por más de tres meses se vivieron en el país con saldo de más de 40 muertos, múltiples heridos y muchas pérdidas materiales.
La MUD, organismo venido a menos como factor aglutinante de los partidos de oposición, como bien sabemos, nunca se pronunció ante los flagrantes atentados contra la democracia por la vía armada ni por la vía de “hacer chillar la economía” como el gobierno de Nixon logro en el Chile de Allende, lo cual aquí está en pleno desarrollo y enfrentado decididamente por el gobierno revolucionario, con un pueblo, al menos la mayoría de él, esperanzado en que a esta faceta de terrorismo de tinte económico también se le derrote.
Todos los intentos desde la derecha, no han podido, hasta ahora, crear el cisma que los enemigos lacayos de aquí y los foráneos imperiales esperaban, los resultados y en algunos casos los métodos, más bien lo que lograron fue dividir la llamada mesa de la unidad, que en una crisis de liderazgo inocultable, se quedó como perro sin amo, en búsqueda de alguien que se hiciese cargo del muerto y de sus deudas, con un colectivo que no por ellos, sino porque los unen sentimientos de odio a todo lo que huela a revolución, les ha seguido y perdonado tantas, tan seguidas y consecutivas metidas de pata.
No les fue posible encontrar una figura de prestigio, que las hay, en la derecha, o bien porque nadie se atrevía a cargar con ese mastodonte, bien porque lo que quienes dominan el esperpento político de la mesa, no tuvieron el arrojo de buscar un personaje que por lo menos garantizara una dosis de seriedad.
Como los burros se juntan para rascarse y la oposición que aquí tenemos es terrorista por acción u omisión, no les quedo de otra que buscar alguien que hubiese demostrado con sus actuaciones ser un terrorista, en cualquiera de las facetas en que el terrorismo se presenta y encontraron uno que desde un espacio televisivo, en un canal caracterizado por ser punta de lanza del terrorismo mediático, parte de la estructura financiada por el imperio, podía servirles para continuar sus planes de desestabilización, en los cuales es ducho el personaje conocido como El "Chuo, el cual por supuesto aceptó a sabiendas de que es muy poco lo que tiene que perder y que para seguir recibiendo el diezmo imperial, requiere tener una tribuna dedicada a continuar de alguna manera su terrorismo, que como sabemos se le vio interrumpido, por los cambios surgidos en un canal otrora golpista por excelencia.
Quienes conocen de cerca al personaje, que recién triunfante la revolución daba su vida por ella y por su líder y que pudieron comprobar la metamorfosis que sufrió, al venderle su alma al diablo por unas cuantas monedas, saben perfectamente que ese señor, no tiene nada que aportarle a la política venezolana, desde la principal posición que ahora va a representar en el sector opositor, que en el desespero de no encontrar en qué palo ahorcarse, agarró el primero que se le presentó y que con seguridad va a ser un fiasco tal, que se va a reflejar el próximo año en las elecciones parlamentarias, que van a ser, si es que llega hasta allá, el escenario para que ponga la cómica como la que ponía cada vez que salía a la calle con un micrófono a ejercer su terrorismo mediático en su bodrio de nombre “Radar de los Barrios