Editorial
La inflación se traga todo el dinero del mundo. Uno agarra en sus manos cien, doscientos, trescientos mil bolívares o más y se le van en un abrir y cerrar de ojos. ¿Cómo podemos comer bien sino encontramos los alimentos, y si lo encontramos nos sacan los ojos por ellos. Los chinos. Venezolanos. Portugueses. Árabes. Sean quienes sean. Nos “atracan”, como unos corderitos. Las medicinas tampoco aparecen. Para entrar a un mercado Bicentenario o un Pdval hay que hacer un curso intensivo de cómo sobrevivir en una cola bajo el inclemente sol, y no morir en el intento de comprar unas cositas. No se trata de quejarnos por quejarnos, sino de decir las cosas tal y como le están sucediendo a los venezolanos y venezolanas. ¿Quién, de la clase media, puede comprar una vivienda decente? ¿Quién puede comprar un carrito, por pequeñito que sea? Por cierto, señor Presidente Maduro, cuándo va a proceder a un aumento de sueldo. Estamos a la espera.
2. Con la ministra Nancy Pérez
Ministra Nancy Pérez Sierra, usted es nueva en el cargo. Eso es verdad. Usted es una guerrera del chavismo. Eso es verdad. Como chavista también, le pido por favor, que solucione el problema de la escasez de medicamentos. Mire, ministra yo soy un una persona de la tercera edad. Sufro de hipertensión. ¡Cáigase pá tras! No los encuentro en Puerto Ordaz. Una hija que vive en Villa Hermosa, México, ha tenido que enviármelos con ingeniero venezolano que labora en Pemex. Como esos medicamentos existen muchos, muchísimos que tampoco se consigue, a pesar de la “sanqueadera” de de farmacia en farmacia. ¿No es justo, verdad, ministra? Entonces a nombre de los miles y miles de personas que andan como yo, sin conseguir los medicamentos, le pido, por favor, que solucione este problema. Es un problema, junto a otros, que le va a causar daño al chavismo, en las próximas elecciones parlamentarias.
3. Con la fiscal Luisa Ortega Díaz
Señora Fiscal, usted conoce el caso de la compra de 8 patrulleros por el Estado para la Armada, a España. Construidos por la empresa Navantia. Usted conoce este caso. Estoy seguro. Pensé que el periodista José Vicente Rangel, le preguntaría sobre el caso, el domingo pasado en su programa, dado que él fue el primero en denunciar este caso de corrupción. Usted sabe también que en España hay dos o tres detenidos por este asunto. Pero en Venezuela nada. A pesar de que existe una empresa de dos venezolanos que recibieron 42 millones de euros por disque un asesoramiento. Usted, señora Fiscal, habló en esa entrevista del domingo, que se luchaba encarnecidamente contra la impunidad. Pero este caso evidencia lo contrario. El propio JVR, en sus confidenciales, tocó de nuevo el tema. Preguntó: ¿Hay militares implicados en este acto de corrupción? Usted tiene la palabra.
4. Con el presidente de las Industrias Básicas
En efecto, se trata de José David Cabello, hermano del hombre más poderoso de la revolución. A él me dirijo respetuosamente para pedirle, como cevegista que soy, que definan qué van a hacer con la Corporación Venezolana de Guayana. Un organismo emblemático para el estado Bolívar, por su rol determinante en la construcción de una ciudad, como Puerto Ordaz, que, hoy día, forma parte, con San Félix, de Ciudad Guayana. Durante 15 años de revolución, nada se ha hecho por esta institución. Prácticamente ha quedado para entrenamiento de algunos generales que el Presidente Maduro no encuentra donde ponerlos, y “puquiti” los manda para la CVG, donde se irrespetan a sus trabajadores, donde no se les paga a tiempo los compromisos contractuales, donde se echa a un lado a los jubilados, pensionados, incapacitados y sobrevivientes, respecto a sus beneficios. Tal es el caso del bono alimentico que ya fue aprobado por el General Carlos Osorio, hoy ministro de la Presidencia. Definan qué hacer con la CVG, la liquidan, por completo, o la reactivan, de verdad, verdad. La revolución está en deuda con la región, por su displicencia con la CVG. ¡Nos cansamos! Chao ¡Volveré!
