Editorial
Aquí, en nuestra Patria, La de Bolívar y Chávez, Diosdado Cabello, se lanzó tremendo mazazo en contra de los "escuálidos" que están enchufados en las esferas del Estado y del Gobierno. Eso no es nuevo. Desde la era Chávez, se colearon viarios camaleones. Por aquello de que en río revuelto ganancia de pescadores. Se enquistaron en el gobierno, en los ministerios, en las gobernaciones y alcaldías y en las empresas públicas, aún los hay por centenares: robando y enriqueciéndose, directamente o a través de testaferros. Así que Diosdado no ha descubierto un "oasis" en el desierto. Eso lo sabía hasta el Papa Francisco, en el Vaticano.
1.Fuera los escuálidos enchufados
Tarde piaste pajarito, podría decir alguien por allí. Después de 15 años Diosdado ha descubierto que hay enchufados en el Estado y el Gobierno que son escuálidos. Buena parte de esos "enchufados" son quienes se han llenado los bolsillos hasta más no poder. Lo he dicho en otros comentarios: hay millonarios "rojos, rojitos", quienes se han aprovechado de las bondades de una revolución "boba". "No pueden haber jefes que sean escuálidos en organismos del Estado. No harán la revolución", dijo Diosdado en acto del PSUV, en Anzoátegui. ¿Le sorprende a usted, lector, este gran "descubrimiento" del gran "piachi" Diosdado Cabello? Eso lo sabe Raimundo y todo el mundo. Ahora, el Presidente Maduro, aprovechará esta revelación del Vice presidente del PSUV, para lanzar una nueva revolución: la revolución contra los escuálidos enchufados. ¿Hasta cuándo tantas bobadas?
2. La ocasión del verdadero sacudón, se perdió
Haber limpiado al Estado y al gobierno de esa lacra ladrona, sí que hubiese sido un sacudón, de verdad, verdad, en aquel momento que lo anunció en varias oportunidades el Presidente Nicolás Maduro. Pero nada que ver. El viento se llevó aquellos anuncios, que crearon grandes expectativas en los venezolanos y venezolanas. Sin embargo, las denuncias que ha venido haciendo Diosdado Cabello, no sobran para nada. Él está haciendo estos señalamientos en las reuniones con las bases del PSUV, con mira a afinar la organización, más y más. "El partido tiene que ser pilar fundamental, el PSUV tiene que tener ojos en todas partes. No puede seguir habiendo escuálidos, arraigados, dirigiendo empresas de la revolución… porque esos van a sabotear la revolución…". Esa acción debió formar parte del famoso "sacudón" que todos esperaban y que nunca llegó. Chao. ¡Volveré!